(El Mercurio) Las operaciones en el yacimiento de cobre más grande del mundo están paralizadas desde ayer. Los 2.500 trabajadores del Sindicato N° 1 de Escondida estarán en huelga por tiempo indefinido hasta llegar a un acuerdo en la negociación colectiva con BHP Billiton, la empresa que controla el 57,5% de la mina.
Con un escenario de incertidumbre en torno al tiempo que se extendería la paralización, varios bancos de inversión y analistas ya hicieron reajustes a las previsiones del precio del mineral rojo para este año.
Ayer, durante el primer día de huelga, el precio del mineral rojo cerró en US$ 2,66, por encima de los US$ 2,63 registrados el 7 de febrero, cuando el sindicato anunció la paralización.
«Hay riesgos a nivel global que apuntan a una menor oferta por menor producción. No solo es la huelga en Escondida, también está el problema de abastecimiento en la mina Grasberg. Además, se espera que lo que pase en Escondida influya en la negociación de Collahuasi, que es a mediados de este año. Hay una serie de efectos que podrían impulsar o entregar un riesgo de abastecimiento y con ello presionar su precio», explica Felipe Ruiz, analista de Bci Estudios.
El banco de inversión Credit Suisse elevó ayer su previsión de precio promedio para 2017 de US$ 2,45 a US$ 2,50. Mientras que la otra firma suiza que se dedica a este mismo negocio, UBS, estimó que si se registrara un déficit en el mercado de 475 mil toneladas por la paralización en Escondida y los problemas de abastecimiento en Grasberg (la segunda mayor mina del cobre del mundo), el precio del mineral podría llegar a US$ 3 durante 2017 y US$ 3,25 en 2018.
Para Gabriel Cestau, economista del Banco Santander, buena parte del alza ya se ha internalizado en los precios actuales, porque la incertidumbre se generó antes de que el sindicato iniciara la huelga, «el mercado también descuenta lo que está pasando, o sea, el mercado en su formación de precios ya estaba con la expectativa de que se paralizaría Escondida», añadió.
Por ahora, los mercados están atentos a lo que suceda en Escondida, pero sobre todo al tiempo que dure la paralización. De eso dependerá si al finalizar el año, el mercado cumple sus proyecciones de superávit o si finalmente habrá déficit, explicó Ruiz.
La firma estadounidense de inversiones Goldman Sachs, por ejemplo, estima que si la huelga se prolonga por 20 días (el promedio de lo que duraron las dos últimas paralizaciones en Escondida), sumado al escenario de un retraso de un mes en los permisos de exportación de Grasberg, habría una reducción de 1,2% en la oferta mundial del cobre. «El calendario de estas interrupciones es importante ya que, en caso de que se materialicen durante los próximos tres meses, esperamos ver un fuerte repunte cíclico y estacional en la demanda china post Año Nuevo», señaló el banco.
Comité de Emergencia
En respuesta a la huelga, BHP Billiton conformó un Comité de Emergencia liderado por su presidente, Marcelo Castillo, e integrado por ejecutivos de diversas áreas, para resguardar la seguridad de las personas y las instalaciones mientras se extienda la huelga.
«El foco en este período será mantener los servicios mínimos concedidos por la Inspección del Trabajo y dar continuidad a los proyectos de inversión, como la construcción de la segunda planta desalinizadora y la extensión de la Planta Concentradora Los Colorados», indicó Patricio Vilaplana, vicepresidente de Asuntos Corporativos de la minera.
La Sociedad Nacional de Minería (Sonami), a través de su presidente, Diego Hernández, lamentó que las partes no hayan llegado a un acuerdo: «Esperamos que alcancen un pronto acuerdo para normalizar la operación».
Presupuesto
El Gobierno estimó un precio del cobre de US$ 2,20 cuando elaboró el erario de este año. Trabajadores se preparan para soportar dos meses movilizados y viviendo en campamento
A las ocho en punto, justo a la hora del cambio de turno en Minera Escondida, ubicada 170 kilómetros al sureste de Antofagasta y a unos 3.200 metros sobre el nivel del mar, comenzó la movilización del Sindicato N°1, que en su primer día congregó a cerca de 800 trabajadores en el yacimiento y unos 120 en la planta desaladora ubicada en el extremo sur de la ciudad nortina, donde también hubo bloqueo en sus accesos.
Con unas 350 carpas, generadores de electricidad, bidones de agua, toldos y un comedor improvisado, el campamento provisorio se instaló a unos 800 metros del acceso principal de la minera y del campamento de trabajadores de planta, conocido como San Lorenzo. Es una zona de clima extremo, con temperaturas bajo cero durante la noche y sobre los 30 grados en el día.
En paralelo, otro grupo de unos 30 trabajadores bloqueó el segundo acceso principal, denominado P12, a unos cinco kilómetros de la minera por la ruta internacional hacia el paso fronterizo con Argentina de Socompa. Allí también se levantó un campamento.
Hasta ayer solo había trabajadores de la minera en el acceso principal del yacimiento y sus alrededores, bloqueando la entrada y controlando el flujo de vehículos. Carabineros no se había hecho presente.
Patricio Tapia, presidente del sindicato que reúne a 2.513 trabajadores, aseguró estar «preparados para resistir 60 días en huelga y si durante ese plazo no hay respuestas por parte de la empresa existe un plan de contingencia para seguir movilizados».
Tapia recalcó que «solo hay 15 trabajadores del sindicato autorizados para seguir trabajando en las operaciones mínimas de mantención del yacimiento mientras no esté en producción».
Hasta ayer, y según algunos trabajadores que se mantenían en el campamento, preocupaba la falta de adhesión a la movilización, por lo que los dirigentes llamaron a todos los miembros a sumarse y suspender vacaciones si es necesario. Se espera que entre hoy y mañana se sume gran parte de los trabajadores del yacimiento a la huelga.
En esta oportunidad -aseguran los trabajadores en el campamento- la movilización podría ser incluso aún más extensa que la huelga que el mismo Sindicato N°1 protagonizó en 2006, que se extendió ininterrumpidamente por 26 días, paralizando cerca del 60% de la producción de la cuprífera, además de diversos cortes de carretera en dirección a la operación y también en otros puntos cercanos a la ciudad.
Medios internacionales atentos a la movilización
El cese de operaciones en el yacimiento controlado por la angloaustraliana BHP Billiton acaparó la atención de la prensa internacional. Las notas detallaron el contexto de la huelga y sus efectos.
En el británico The Telegraph, la noticia de ayer tituló: «Huelga amenaza la producción de Escondida, la mina de cobre más grande del mundo». En el artículo destacaron que los niveles de producción del yacimiento no solo incidirán en los precios del mineral, sino que además «la huelga puede sentar las bases para las negociaciones salariales en toda la industria, lo que podría elevar los costos para el sector minero en Chile».
En el diario australiano The Sydney Morning Herald también enfatizaron en el alza de los precios desde el anuncio de huelga, mientras que en The Wall Street Journal mencionaron el impacto que tendrá la paralización de la mina en el contexto de desaceleración económica del país.