(La Tercera) Los escándalos políticos de los últimos días han restado algo del brillo de Chile como alumno estrella en América Latina para Wall Street. Pero Morgan Stanley cree que el pesimismo, con algunos observadores advirtiendo que la suma de turbulencia interna y contexto externo más complejo harán que la recuperación sea de corta vida, es exagerado.
En un informe de 26 páginas llamado El caso por Chile, los analistas del banco estadounidense dicen que aunque los desafíos abundan, “somos más constructivos respecto de Chile que el consenso cada vez más cauteloso”.
Sin minimizarel impacto de los escándalos recientes, que a juicio de Morgan Stanley pueden afectar el retorno de la confianza y demorar la recuperación, la firma cree que “cuando menos, los eventos muestras que las instituciones están funcionando y que nadie está sobre la ley”.
Además, dice, que estos eventos sean conocidos son señal de una democracia que madura.
En tercer lugar, según Morgan Stanley, la crisis interna ofrece una oportunidad. “Mucho depende de cómo la clase política maneje la turbulencia actual: ¿llevará a una parálisis o a una mayor construcción de consensos?”, plantea el texto. “Si los escollos de hoy llevan a menos polarización, un foco renovado en los desafíos de Chile y un debate más saludable respecto de cómo satisfacer las demandas de la sociedad, la democracia chilena puede terminar fortalecida”, añade.
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Alumno destacado
Morgan Stanley también encuentra puntos positivos en la economía. “En una región que aún lucha por ajustarse a un ambiente de menores términos de intercambio y un dólar más fuerte, Chile parece sobresalir del grupo: la economía parece haber atravesado el grueso del ajuste y está saliendo gradualmente del bajón con una dinámica de crecimiento más sana, aunque moderada, y sin excesos preocupantes”.
La firma destaca que las autoridades chilenas no trataron de oponerse al ajuste. “Las políticas prudentes de Chile evitaron la acumulación de excesos en la economía, dejándola en mejor posición para enfrentar” la normalización de la política monetaria estadounidense.
¿Qué falta? Un vuelco en la confianza que sustente una mayor inversión, dice el banco, y cree que frente a tanto ruido existe la posibilidad de que la reforma laboral se diluya.