Un llamado al análisis de los efectos que tendría el eventual cierre de Codelco Ventanas realizó la Cámara Minera de Chile.
El organismo expresó que “si bien, Codelco Ventanas está inserto en lo que se ha pasado a llamar “Zona de Sacrificio”, por el daño que ha causado la contaminación a quienes ahí viven; es importante señalar que sus emisiones son bastante más bajas que otras industrias ubicadas en ese sector”, agregando que “no hay que olvidar que las fundiciones en Chile se rigen por una nueva norma ambiental, el Decreto Supremo N°28, de reciente entrada en vigencia, que establece un nuevo nivel de emisiones, que claramente está fijado para no dañar el medio ambiente y proteger la salud de las personas”.
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En esa línea, la Cámara advirtió que la decisión de cerrar estas instalaciones «debe ser analizada y compartida por todos los grupos de interés, que por lo demás, requiere de una reforma legal. Nuestro sueño es reconvertir la fundición en base a tecnologías de punta, ampliando la industrialización de nuestras materias primas, anhelo pendiente desde hace 50 años. Avancemos en una industria minera como una fábrica moderna de bienes de capital en base al cobre y otros metales”.
En ese contexto, la entidad manifestó que “es urgente establecer ahora, una Política Nacional de Fundiciones, de modo que, con objetivos estratégicos, metas, financiamiento e indicadores de desempeño para el largo plazo, se resuelvan los conflictos de organización territorial y ubicación de estas industrias, con pueblos o ciudades aledañas a estas instalaciones. No olvidemos, que la falta de política y planificación territorial oportuna ha originado la situación de contaminación en Quintero y Puchuncaví”.