Los retos y aprendizajes que implica ser una operación de baja ley, es una constante en el desarrollo de Sierra Gorda SCM, una faena que se ha caracterizado por la incorporación de nuevas tecnologías y procesos más sostenible.
En conversación con MINERÍA CHILENA, su gerente general, Tomasz Piwowarczyk, detalló las iniciativas con que buscan expandir su desarrollo, considerando el actual escenario normativo y operacional.
¿Qué se requiere para que la industria minera chilena pueda incrementar su producción, para responder a la mayor demanda por materias primas?
Existe evidencia que los inversionistas están interesados en nuevos proyectos mineros de cobre, porque el mundo requerirá duplicar el suministro de este mineral para alcanzar los objetivos climáticos del acuerdo de París para el año 2050.
Considero que para aumentar la producción de cobre en Chile es necesario crear incentivos para fomentar la minería de baja ley. Con ello se impulsaría la construcción de nuevas mineras (que inevitablemente tendrán baja ley de mineral, porque esa es la nueva realidad geológica de Chile) y la ampliación de las existentes. Sin incentivos precisos, Chile continuará a la baja en su producción cuprífera.
Lamentablemente, en la actualidad, advertimos una dirección contraria a lo arriba indicado: vemos con preocupación una discriminación contra las compañías mineras con menor contenido de cobre por la nueva ley de Royalty. En virtud del componente ad valorem (royalty sobre ventas), la minería de baja ley pagará proporcionalmente más que las mineras tradicionales, quienes tienen menores costos para producir una tonelada de cobre.
Continúe leyendo la entrevista a Tomasz Piwowarczyk, gerente general de Sierra Gorda SCM en MINERÍA CHILENA.