La investigadora Raquel Quatrini, científica del Centro Basal Ciencia y Vida y académica de la Universidad San Sebastián (USS), está encabezando un estudio pionero en el volcán Copahue, ubicado en la frontera entre Chile y Argentina.
En esta expedición, Quatrini y un equipo multidisciplinario de científicos ascendieron a 2.900 metros sobre el nivel del mar para recolectar muestras de microorganismos extremófilos, los cuales han sobrevivido a las condiciones extremas del entorno volcánico gracias a su nivel de adaptación.
Investigadora Quatrini. Crédito: Universidad San Sebastián.
Un vistazo al pasado prehistórico
La investigación, enmarcada en un proyecto Fondecyt, tiene como objetivo principal comprender las estrategias biológicas de estos microorganismos, particularmente los acidófilos adaptados a entornos altamente ácidos.
La zona del volcán Copahue, con sus características únicas y sus dos vertientes ricas en azufre, ofrece al equipo científico un fascinante viaje al pasado prehistórico de la Tierra, donde estas formas de vida primitivas han existido por millones de años.
¿Cuáles son sus aplicaciones en la minería?
Los investigadores explicaron que el descubrimiento y estudio de estos microorganismos extremófilos tendría aplicaciones significativas en la industria minera, especialmente en el procesamiento de minerales en los relaves. Los acidófilos desempeñan un papel crucial en la biolixiviación, un proceso que utiliza microorganismos vivos para extraer metales de minerales sulfurados, como el cobre.
Es por ello que este enfoque ofrecería ventajas ambientales sobre la minería convencional, ya que utiliza menos agua y productos químicos peligrosos, reduciendo así el impacto ambiental.
Aunque la biolixiviación puede ser más lenta que los métodos tradicionales, su aplicación representa un paso importante hacia la biominería verde y la remediación ambiental.
Al profundizar en el conocimiento de estos microorganismos extremófilos y sus interacciones con los minerales, se abre la puerta a innovaciones que podrían revolucionar la forma en que se extraen y procesan los metales, promoviendo un enfoque más sostenible y respetuoso con el medio ambiente en la industria minera, aseguraron.