(Pulso) El cobre y el dólar siguen mostrando una tendencia inversamente proporcional. Ayer, el metal rojo bajó un 3,72%, su mayor retroceso diario desde el 14 de enero pasado manteniéndose en mínimos de mayo de 2009 y acercándose peligrosamente hacia el piso de los US$2; la moneda estadounidense, en tanto, que inició la sesión en torno a $718, terminó en $715,3, su mayor nivel desde el 10 de junio de 2003 tras mostrar un avance de $4,6 frente al viernes.
Y es que la constante baja en el precio de los commodities han motivado la depreciación de las monedas emergentes, y que en el caso de peso chileno se ha expresado en una baja de $109,4 en el año.
Asimismo, el mercado ha elevado sus expectativas respecto a la primera alza de tasa de interés en Estados Unidos, lo que lleva a que los rendimientos soberanos estadounidense al alza y que el dólar multilateral se fortalezca. En este contexto, en BCI Estudios explican “que en el último mes se han desarmado US$3.100 millones en posiciones de carry trade en contra del peso chileno”. Con ello, las apuestas contra el peso chileno son las mayores desde marzo de este año.
“Así, la tendencia al alza para el tipo de cambio local permanece y esperamos que persista para el corto plazo. Sólo señales algo más hawkish desde el Banco Central y/o nuevas intervenciones verbales en el tipo de cambio podrían moderar en parte las presiones depreciativas en lo pronto, situaciones que por el momento no se encuentran en nuestro escenario base”, señalaron en BCI.
Gustavo Gallardo, CMT operador senior de Fynsa, destaca que mantienen el view alcista imperante. “No descartamos correcciones de corto plazo, sobre todo al ver un cobre que por el momento es soportado en la zona de US$2,0, que es un objetivo de soporte de largo plazo”, puntualizó.
En todo caso, Gallardo indicó que “dichas correcciones deben ser tomadas como oportunidad de compra. En esa línea, de confirmar el cobre a la baja de US$2,0, apuntamos a niveles objetivo de US$1,8 y luego US$1,6, lo cual se traduciría en un dólar cercano a niveles de $740, el cual es el objetivo actual de tendencia alcista de plazo”.
En tanto, José Raúl Godoy, analista de mercados de xDirect, destaca la incertidumbre que plantea el futuro de la economía china genera una disminución importante de la demanda por el metal, por ende, el precio del cobre se ve afectado directamente a la baja. “De ubicarse el precio del metal por debajo de los US$2 la libra, el dólar podríamos verlo por sobre los $715, en $720 específicamente”, puntualizó.