Recientemente se realizó en el edificio ESID de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Santiago de Chile (Usach), la Conferencia de «Desarrollo Industrial y Cultural: una mirada para la sustentabilidad desde las ciencias naturales», encuentro al que asistieron académicos/as y estudiantes de ingeniería.
La charla se enfocó en la actividad industrial de sectores de la Cuenca del Maipo y su evolución histórica, en base a estudios realizados Inter- y Transdisciplinariamente sobre patrimonio minero en la zona durante los últimos 7 años.
El académico del DiminUsach, escritor y expositor de este estudio, Dr. Alejandro Sánchez, se refirió a aspectos relevantes del proceso de participación y desarrollo: “Hubo un conjunto de organizaciones ciudadanas de San José de Maipo que decidieron hacer un encuentro científico, estas organizaciones tienen la visión de que la ciencia debiera salir de los científicos a los vecinos. Entonces, nos congregaron a hablar de ciencias en distintas temáticas; esta es la parte Transdiciplinar del estudio”.
Inter y transdisciplina del trabajo presentado
Seguida la presentación de difusión científica, el académico sostuvo que aunque la Geología en sí misma involucra distintas disciplinas, como: biología, química, geoquímica, física e incluso astronomía, la interdisciplina del estudio se desarrolló con ingenieros, periodistas y psicólogos, o indagando en otros campos disciplinares como antropología, historia y arquitectura para abordar el patrimonio minero de la comuna de San José de Maipo y de areneros artesanales de Buin y San Bernardo; esto también se ha aplicado en los trabajos de título de Ingeniería en Minas Usach.
Sobre el trabajo global y de vinculación, el académico comentó que «hemos trabajado con organizaciones de la Sociedad Civil y Gremiales, Asociación de Mineros, Corporación de Areneros y trabajos en conjunto con el Municipio y Junta de Vecinos; esto es lo que hace este estudio Transdisciplinar”.
Entorno natural e historia
Asimismo, Sanchéz aseguró que “durante La Colonia se encontró el primer yacimiento de plata en territorio chileno en San Pedro Nolasco, por tanto, el más importante de la época y en él había Plomo, Zinc y Cobre. Eso llevó a que La Colonia fundara San José de Maipo, entonces nace esta localidad para controlar la minería que en 100 años se tornó irregular, donde un 5to de la producción se la quedaba el rey de “La Corona”. Entonces, los mineros comenzaron a vender no mediante La Corona sino que a particulares. Los particulares tenían mayor importancia económica; para controlar eso La Corona decide fundar San José de Maipo”.
Posteriormente, Sánchez realizó una cronología de hitos de la localidad de El Volcán, pueblo que está en el Cajón del Maipo: “Ahí se explotó Cobre y la gente que explotaba ese Cobre se quedó viviendo cercana a esos yacimientos (…) El campamento surgió con la explotación del Cobre sin mayor planificación inicial. Luego surgió la necesidad de organizarse, el pueblo creció en cantidades de habitantes, comenzó el comercio, la necesidad de iglesias, colegios”.
Detalló que en 1840 se comenzó a explotar el cobre en la zona, conformando sociedades y plantas de procesamiento e infraestructuras en El Volcán y Las Melosas, éstas llegaron a ser las más modernas del país. Posterior a eso aparece la industria del Yeso, demostrando que la facilidad de conexión mejoró la actividad económica.
Por otro lado, río abajo “la población de Areneros Artesanales, han hecho su vida por décadas y generaciones en las riveras del río, han sufrido las inundaciones río arriba. Han formado un ritmo de vida que le es propio, tienen su lenguaje, su manera de relacionarse. Tienen hoy en día una distribución de los espacios de trabajo. Porque en ese sentido al ser artesanales, son familias que se dedican a eso, no hay una industria o compañía o empresa como en el caso de las mineras. Tienen un arraigo con el entorno natural que es propio de la actividad extractiva”, explicó Sánchez.
En consecuencia, el arraigo en ambos «mundos» hace que sus habitantes busquen actividades sustentables, que den continuidad a su actividad económica finalizada la actividad minera o arenera, dando continuidad así a su «Desarrollo Cultural» que se facilitaría con una concepción amplia de patrimonio cultural que incluya el entorno natural (fuente de los recursos) y con modificaciones a la Ley de Cierre de faenas mineras que faciliten realizar actividades en los sitios que se cerrarán, remarcó Sánchez.