En la celebración del séptimo aniversario de la Red de Ingenieras de Minas (RIM Chile), la economista Daniela Desormeaux explicó la evolución de los commodities en la última década y los desafÃos que tiene la industria minera en estos contextos más volátiles.
La directora de Estudios de Vantaz Group se refirió a la mayor incertidumbre que existe actualmente: «Cuesta más anticiparse a las decisiones, y ver un poco qué es lo que está pasando afuera nos ayuda también a poder ver cómo esto va a tener algún impacto en nuestros mercados y en todo el ecosistema minero, porque somos un paÃs abierto; todo nuestro cobre se exporta y gran parte de nuestros insumos y equipos que usamos los traemos de afuera. Por lo tanto, tenemos que estar mirando afuera», dijo.
En ese contexto, precisó que «antes, los ciclos de los commodities estaban muy relacionados con los factores oferta y demanda. Hoy dÃa tenemos factores adicionales que hacen que sea muy complejo anticiparse. Por ejemplo, hoy dÃa estamos viendo con mayor fuerza el efecto del cambio climático».
Asimismo, profundizó con que previo a la pandemia existÃa una mayor estabilidad, por lo que “uno podÃa anticipar, en función de cómo se movÃan los mercados, balance oferta-demandaâ€, pero luego del 2020 todo el panorama cambió».
«Vimos de manera muy marcada mayor integración, apertura del mundo, apertura tecnológica, apertura de los mercados, firmas de tratados de libre comercio. Todo eso pasó antes de la pandemia. Después de la pandemia, al contrario. La pandemia también nos mostró que toda esta apertura comercial también nos genera ciertas vulnerabilidades. Y estratégicamente, sÃ, nos conviene, por ejemplo, comprar afuera, pero también es importante que contemos con proveedores locales por un tema obviamente de agregar valor y de generar valor en nuestros territorios, pero también por un tema estratégico», puntualizó Desormeaux.
Por todo lo anterior, según la economista, “los ciclos económicos antes eran menos frecuentes, se podÃan anticipar de cierta forma. Hoy dÃa los ciclos son mucho más cortos, son más intensosâ€.
En esta lÃnea, la industria minera, como uno de los principales propulsores de commodities en nuestro paÃs, tiene varios desafÃos, según detalló Desormeaux, como impulsar una minerÃa segura, inclusión de mujeres, desarrollo de capital humano, transición energética, entre otros. Pese a lo anterior, “tenemos espacio para poder seguir siendo competitivos y tenemos todavÃa potencial para seguir creciendoâ€, añadió.
En relación a temas de inclusión, la economista precisó que aunque hay un crecimiento en los últimos seis años de la cantidad de mujeres que está en minerÃa, hay mucha volatilidad, ya que “las mujeres entran y salen de la fuerza de trabajo con mayor frecuencia que los hombres, porque tienen que hacerse cargo del cuidado de terceras personasâ€.
“El mensaje es éste: cómo ha aumentado la ocupación de la mujer en minerÃa, pero además nos muestra esta vulnerabilidad del empleo, que en el fondo lo que tenemos que hacer es, por un lado, que entren, pero (también) retenerlas, mantenerlasâ€, cerró.
Esfuerzos para fomentar la inclusión femenina
En tanto, Natalia Morales, gerenta del Consejo de Competencias Mineras de CCM-Eleva, habló de la participación de las mujeres en la minerÃa, además de cómo se les está atrayendo a carreras vinculadas con esta industria.
La ejecutiva valoró que, en comparación con otros paÃses, la inclusión femenina en minerÃa en Chile, «a diferencia de otros paÃses con los que nos hemos ido comparando, nunca decae (…), se ha mantenido en el tiempo y eso es un golazo, no lo tienen otros paÃses; no hemos ido subiendo y bajando. Crecimiento sostenido».
Pese a lo anterior, llamó a no decaer en el impulso de atraer a mujeres a la minerÃa: “Esperamos, desde la Alianza CCM-Eleva, que sean esfuerzos asociados a una estrategia, que sean esfuerzos sostenidos en el tiempo y que estén acompañados de un cambio cultural. Porque acá la importancia detrás de este número (más de 12 mil mujeres) no es solamente aumentar el porcentaje, sino que cada una tenga una experiencia significativa segura, espacios donde ella pueda encontrar crecimiento, desarrollo, espacios libres de acoso y violenciaâ€, precisó.
En esta lÃnea, sostuvo que “las polÃticas sostenidas, colaborativas y conjuntas públicas-privadas funcionanâ€, principalmente porque en Chile “el diálogo se ha instalado como una herramienta de cambio, y ese diálogo ha impulsado los cambios culturales, y hemos pasado a estar preocupados si pintamos los camarines rosados o celestes, a si efectivamente hacemos cambios en infraestructura, en equipamiento, en establecer liderazgoâ€.

