(Pulso) La encuesta de Caracterización Socioeconómico Nacional 2013 (Casen) no sólo mostró una baja considerable en el nivel del pobreza nacional, sino que también entregó una radiografía de las distancias que existen en las regiones de Chile.
En este informe se evidencian las cifras de 2013, sin embargo cuando esos resultados se comparan con los entregados para 2006, la evolución de las regiones da cuenta de fuertes diferencias.
El ingreso promedio del país aumentó un 19% entre estos años, pasando de $636 mil 099 en 2006 a $757 mil 325 en 2013.
Pero no todas las regiones presentan cifras cercanas a ello. De hecho la I región de Tarapacá creció un notable 57% en 7 años, con ingresos por hogar de $552 mil 702 en 2006 a $870 mil 399 en 2013. Le sigue Aysén con un 39% de aumento, que ha visto impulsado su desarrollo por la industria ganadera, el turismo, la industria forestal y salmonera. En 2006 el ingreso promedio de la región era de $549 mil 827, incrementándose a $766 mil 425 en 2013.
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En contraste, la nueva región, inmediatamente cercana de Arica y Parinacota sólo aumentó su ingreso en 3% situándose en el punto más débil de la muestra con un ingreso promedio de $589 mil 689 en 2006 a $609 mil 745 en 2013.
La segunda de menor avance es la de Los Lagos aunque con dos dígitos de variación. Pasó de un ingreso promedio de $535 mil 682 en 2006 a $590 mil 740 en 2013.
Diferencia en el extremo norte
Las razones de este incremento se deben principalmente a la inversión de privados en la zona y al impacto en los salarios de los trabajadores, en conjunto con el área comercial impulsada por la zona franca de Iquique y el turismo que está en franco crecimiento.
En contraparte está su vecina región XV que creció solo un 3%. Según el senador que cumple su segundo período de 8 años representando a ambas regiones Jaime Orpis (UDI), esta diferencia se debe a que “el grueso del empleo en la región de Arica es por administración pública”, añadiendo que hay poca inversión privada.
Indicó también que la crisis mundial que se vive por el bajo precio del trigo influye mucho en la región ya que en esta zona existen muchos proyectos agrícolas que se pueden haber visto perjudicados por este factor.
Frente a Tarapacá indicó que en las 3 áreas donde se destaca esta región son precisamente aquellas en las que Arica está más débil, como o son minería, comercio y turismo, añadió que “es una región muy dependiente del sector público y las de las Fuerzas Armadas”.
Incluso si se analizan las cifras de crecimiento, no hay explicaciones muy lógicas. Desde 2008 cuando el INE (Instituto Nacional de Estadísticas) presentan cifras de Actividad Regional (Inacer), Arica parte con mal pie y evidencia caídas de 16,1% y 10,2%, en 2008 y 2009, respectivamente. Versus Tarapacá que exhibe números positivos de 7 y 5,6% respectivamente.
Pero después la situación cambia y en 2010, el Inacer de Arica fue de 5,6% frente al 4% de su vecina. En 2011, se repite el mayor ímpetu con cifras de 4,6% versus 2,7%.
Ya en 2012 el panorama es bien distinto pues Arica crece 2,8% mientras que Tarapacá cae -6,9. En 2013 ambas se observan más a la par con expansiones de 5,8% en la región del Morro ante el 6,8% de Tarapacá.
Zona rural vs zona urbana
En la encuesta también se miden otros ámbitos, como la generación de ingresos entre las zonas rural y urbana. La Casen informa de tres fuentes: ingresos del trabajo que contempla lo obtenido por remuneraciones y sueldos; ingreso autónomo que incluye dineros extra como trabajo independiente, rentas, retiro de utilidades, jubilaciones, pensiones, etc. ; y finalmente, los subsidios monetarios que son los aportes del Estado. La suma de todos estos factores determina el ingreso monetario por hogar.
Al observar las cifras, se evidencia un aumento en los subsidios monetarios tanto que en la zona rural, del total de ingresos por hogar, en 2013 un 78,5% equivalen a recursos por concepto de trabajo cuando éstos representaban el 82,3% en 2006. En las zonas urbanas la proporción también varía, aunque en menor proporción desde 82,3% en 2006 a 83,5 en 2013.
Visto de otra manera, a nivel nacional un 22% de los ingresos provienen por concepto de subsidios monetarios, siendo las regiones que más reciben ayuda por parte del Estado la IX de la Araucanía con un 37%, seguida por la X región de Los Lagos con tasas que llegan al 34%, en la otra vereda se encuentra la II región de Antofagasta que un 13% de los ingresos monetarios equivalen a subsidios del Gobierno. En Santiago esta cifra llega a 16% también bajo la media nacional.