(El Mercurio) Durante la campaña presidencial, la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) denunció en más de una ocasión que los temas laborales no estaban lo suficientemente representados en los programas de los candidatos. De hecho, hubo momentos de alta tensión, sobre todo cuando la presidenta de la multisindical, Bárbara Figueroa, cuestionó la escasa información proveniente del comando de Bachelet.
Pero, definitivamente, el tiempo y la administración del poder lo curan todo y, a doce días de asumir, la agenda laboral del gobierno se delinea cada vez más cercana a las demandas de la CUT.
De hecho, la ministra del Trabajo, Javiera Blanco, confirma cuáles serán las fórmulas que intentará implementar para fortalecer a los sindicatos y ampliar los alcances de la negociación colectiva.
-¿Tiene definidos los tiempos de implementación de la agenda legislativa?
«¿Cuál parte de toda la agenda? Es una agenda grande…».
-Relaciones laborales propiamente tales: fortalecimiento de los sindicatos, negociación colectiva y huelgas.
«Hay una clara agenda laboral del programa de la Presidenta Bachelet y en materia de derechos colectivos hay varios temas importantes en el contexto de un país que ha avanzado mucho en derechos individuales: temas de subcontratación, temas de judicatura laboral y, en derechos colectivos, hay varios desafíos».
-¿Cuáles son los desafíos en el tema de derechos colectivos?
«Titularidad sindical para la negociación colectiva, el fin al reemplazo de trabajadores en huelga, la extensión de los temas que son materia de negociación colectiva. En los cien primeros días, están los temas que también tienen impacto en los procesos de negociación colectiva, que es el caso del multi RUT. Ese es un tema que nosotros ya habíamos anunciado: el envío de una indicación sustitutiva en los primeros cien días y en eso estamos trabajando. La idea es poner fin a esta práctica abusiva, que genera distorsión justamente atentando contra la protección de los derechos de las personas».
La titularidad sindical es uno de los temas que se han abordado en las negociaciones entre la CUT y la CPC e implica que los sindicatos tendrían la exclusividad para decidir si los derechos emanados de la negociación colectiva -reajustes salariales, bonos por fin de conflicto, etc- se hacen extensivos a los trabajadores no sindicalizados. Con el esquema actual, los empleadores suelen extender esos beneficios a los no sindicalizados.
¿Negociación por rama?
-¿La idea es que la negociación se dé en el marco de la empresa o están evaluando esquemas de negociación por rama?
«Lo que tenemos claro es que queremos fortalecer a los sindicatos y fortalecer la formación sindical, porque yo creo que hay una suerte de resquemor frente a los derechos colectivos. La evidencia comparada muestra que el fortalecimiento de los derechos colectivos genera mayores confianzas en las relaciones, genera menos conflictos y eso va a favor de las mejoras en los niveles de productividad de las unidades económicas».