Para el año 2050, Orica tiene el reto de alcanzar las cero emisiones netas de gases de efecto invernadero de tipo 1 y 2 (aquellas que podemos controlar directamente, por ejemplo, las que se producen como resultado de procesos de fabricación), y de tipo 3 de los volúmenes adquiridos de nitrato de amonio y de amoniaco (responsables de aproximadamente un 70 % de las emisiones indirectas totales de Orica).
Este es un paso importante hacia un futuro sustentable. Tiene un impacto sustancial en el objetivo de reducir las emisiones de tipo 1 y 2 por lo menos un 40% para 2030 en comparación con los niveles de 2019.
Durante 2020, en Orica, la planta de fabricación en Bontang (Indonesia) registró una reducción de emisiones netas de 43%. Asimismo, la planta de fabricación de nitratos en Kooragang Island (Australia) logró una reducción de emisiones netas de 6,3 % gracias al reemplazo y la mejora de desempeño de tecnologías de reducción selectiva de catalizadores.
Este año, el equipo Orica en Carseland (Canadá) instaló y está encargando tecnología terciaria de reducción de catalizadores. El efecto proyectado de esta acción es una reducción de las emisiones debido a la producción de ácido nítrico por aproximadamente 83.000 tCO2-e por año. Esto significa reducir a la mitad las emisiones del sitio.
Cabe destacar que Orica destinará aproximadamente A$45 millones en el transcurso de los próximos cinco años para implementar tecnologías terciarias de reducción similares en las plantas de fabricación de nitrato de amonio en Yarwun y Kooragang Island. Esto reducirá las emisiones en casi un 60 %, o 750.000 tCO2e por año.
En tecnologías emergentes, actualmente Orica está apoyando la construcción de una planta móvil de demostración de tecnología de captura, utilización y almacenamiento de carbono en Kooragang Island, la cual está prevista para fines de 2023.