Si bien todas las bolas de acero utilizadas en el proceso de molienda poseen un pequeño porcentaje de cromo (inferior a 1%), la propuesta de Magotteaux es utilizar bolas de acero Duromax con alto contenido de cromo (11% a 30%), con el fin de tener un menor desgaste en el molino y a su vez generar una pulpa con menores contenidos de óxidos ferrosos, lo que contribuye a obtener una mayor recuperación del mineral durante el proceso de flotación.
Desde el punto de vista técnico, Xavier Boreux (en la foto), gerente general de Magotteaux Andino, señaló que el menor desgaste se debe a la mayor resistencia a la corrosión y dureza que otorga la aleación cromo-hierro. Asimismo, indicó que la mejor recuperación de mineral se explica porque el óxido ferroso liberado de las bolas tradicionales (sin alto porcentaje de cromo) ocupadas en molienda “cubren las partículas de cobre en la pulpa, las que (como consecuencia de esto) requieren más colector para flotar y tienen recuperaciones más deficientes que las partículas de cobre limpias”.
A juicio de Christopher Greet, gerente de Laboratorio de Metalurgia de Magotteaux Australia, lo anterior está en consonancia con los objetivos del circuito de conminución, el que “debe preparar partículas con la liberación adecuada y la química de la superficie correcta para maximizar la recuperación de minerales valiosos”, sostuvo.
Los ejecutivos de Magotteaux participaron en el International Mineral Processing Congress 2014, realizado en Santiago, donde expusieron las ventajas de su solución.