Un llamado a definir una hoja de ruta clara a nivel país y pensar los desafíos a largo plazo realizó esta mañana el ex Presidente de la República, Ricardo Lagos, como principal orador de la conferencia “Chile a comienzos del Siglo XXI: ¿ad portas al desarrollo gracias a la minería?”, organizada por el Centro de Estudios del Cobre y la Minería (Cesco), con motivo de su aniversario número 30.
En el seminario, desarrollado en el centro Cultural Gabriela Mistral, Lagos recordó que en 2005 (cuando fue jefe de Estado) presentó junto con el Ministerio de Minería y Cochilco la Política Minera del Bicentenario, sin embargo, manifestó que pasados diez años de esta propuesta, “los mismos temas siguen vigentes”.
En esa línea, comentó que tras esta década los nuevos temas que cobran importancia son el agua y los recursos hídricos; la energía, la cual calificó como la más cara y contaminante; los servicios de evaluación de impacto ambiental y la emisión de gases de efecto invernadero.
Bajo su análisis, Lagos planteó que lo importante es “tener una hoja de ruta clara, pues no se construye un país desde cero cada cuatro años”.
En relación con Codelco, el ex Mandatario celebró como una “buena noticia” el anuncio de capitalización por parte del Gobierno, indicando que este mecanismo “obliga a las nuevas autoridades a ser extremadamente responsables en la tarea que tienen por delante».
Asimismo, recalcó la importancia de fortalecer el gobierno corporativo de la estatal y de generar un mayor grado de autonomía con respecto al gobierno de turno, apuntando a acercarse al tipo de funcionamiento del Banco Central.
En la ocasión se realizó, además, un panel de discusión con expertos que analizaron las causas, consecuencias y soluciones para la desconexión entre la minería y la sociedad chilena, en el que participaron el novelista y ensayista Arturo Fontaine, el presidente de la Comisión de Minería de la Cámara de Diputados, Jorge Insunza, el académico y ex ministro Cristián Larroulet, junto al economista y también académico Patricio Meller.
Este último se refirió a los desafíos que debe asumir Chile para aspirar a ser un país desarrollado y manifestó que el cobre debiera generar capacidad tecnológica y de innovación. También aseveró que la minería presenta problemas complejos, como la competencia por agua y el territorio.