(El Mercurio) El jueves 6 de febrero, la Superintendencia del Medio Ambiente (SMA) dejó sin efecto las medidas provisionales ordenadas a fines de enero para Bocamina I después de detectar incumplimientos ambientales. Se trataba de la clausura temporal total y medidas de corrección, seguridad y control.
Tras esto, Endesa Chile informó ayer que, desde el viernes pasado, la central de 128 MW retomó sus operaciones. El gerente de Finanzas de la firma, Fernando Gardeweg, lo confirmó en una conferencia en que informó el estado de los principales proyectos de su carpeta de inversión. No obstante, Bocamina II (350 MW) sigue paralizada desde el 17 de diciembre, por orden de la Corte de Apelaciones de Concepción, que acogió un recurso por incumplimientos a la Resolución de Calificación Ambiental. Por la paralización de esta unidad, Endesa prevé pérdidas de US$ 31 millones.