(Pulso) Los efectos en la caída de los precios de los commodities ya no solo se traduce en desplazamientos de proyectos o ajustes de personal: En los últimos 24 meses al menos 6 yacimientos de la mediana minería han optado por acogerse a una reorganización de pasivos o liquidación para hacer frente a sus deudores.
Y del total, dos de ellas lo han hecho en las últimas dos semanas.
El pasado viernes minera Dayton, de capitales americanos, se acogió a un proceso de reorganización de pasivos ante la Superintendencia de Insolvencia y Reemprendimiento con el que busca reorganizar una deuda que alcanza a los $24.000 millones que mantiene con sus acreedores.
Al haberse acogido a este proceso la empresa contará con una protección financiera por 30 días -que terminará el próximo 1 de julio- y deberá presentar a través de su veedor Patricio Jamarne una propuesta de acuerdo de reorganización o, de lo contrario, se procederá a dictar una resolución de liquidación de la minera.
“Es un procedimiento en el cual la empresa deudora que se encuentra en problemas pretende pagar sus acreencias de una forma distinta a la establecida en el convenio original. Este convenio puede ser referido a un plazo, una condonación o a lo que sea”, explica Jamarne.
Al mismo proceso se acogió el pasado 21 de abril la minera ubicada en la Región de Arica y Parinacota, Pampa Camarones -propiedad de Pampa Mater S.A. (65,3%); Arrigoni Minería SpA (26,7%) y Samsung C&T Chile Copper SpA (8%)-, para cumplir con sus obligaciones, que suman US$110 millones.
Dicha mina explota minerales oxidados de cobre y produce cátodos de cobre, y tiene un permiso para operar por 15 años. El proyecto fue diseñado para extraer cerca de 40.000 toneladas mensuales de mineral en régimen y la planta de cátodos tiene capacidad para producir 700 toneladas de cátodos de cobre mensual, equivalente a 8.400 toneladas anuales del mineral.
Sin embargo, estas no son las únicas. En octubre del año pasado la compañía minera Linderos también se sometió a un proceso de reorganización de pasivos luego que el Banco Security solicitó la liquidación forzosa de la empresa luego que esta no pagara unos US$8,54 millones.
A esto se suman otros yacimientos que se sometieron a este mecanismo con anterioridad, como es el caso de Sociedad Contractual Minera Hierro Tal tal, Cerro Dominador y Minera Dos Amigos.
Según explica Álvaro Merino, de Sonami, todos estos procesos se relacionan con la caída de los precios de los commodities. “La caída en la cotización de los minerales, y particularmente del cobre que es el principal producto minero de nuestro país, ha impactado significativamente en las compañías mineras, disminuyendo sus ingresos, reduciendo márgenes, generando menor producción, paralizando y postergando la inversión y moderando las expectativas de los accionistas”, dice.
“En estos momentos, la industria en general está enfrentando un gran ajuste en sus operaciones donde ninguna empresa ha escapado a este proceso. Sin embargo, este preocupante panorama ha afectado en mayor medida a las empresas de la pequeña y mediana minería, que son precisamente las que muestran costos más altos y menores espaldas financieras”.