(El Mercurio) Por primera vez desde diciembre de 2017, el Indicador Mensual de Confianza Empresarial (IMCE) cae por debajo de los 50 puntos que marca la línea neutral, con lo que pasa a ubicarse en terreno pesimista.
El índice, preparado por la Universidad Adolfo Ibáñez e Icare para monitorear las expectativas económicas de quienes toman decisiones en las compañías chilenas, retrocedió 4,54 unidades en noviembre para aterrizar en los 49,01 puntos. Es el valor más bajo desde fines del año pasado y la primera vez que las respuestas de este reporte se sitúan en el rango pesimista durante el gobierno de Sebastián Piñera. El IMCE tuvo sus valores máximos recientes en febrero (57,38) y en mayo (55,87) pasados, consistente con las mejores expectativas que acompañaron el inicio de la actual Administración. Pero, desde entonces ha emprendido un volátil descenso, que lo llevó hasta su valor más bajo de 11 meses.
«La caída del mes puede explicarse por el impacto de algunas cifras débiles en lo interno y el incremento del nivel de crispación política generado por los hechos en La Araucanía», dice Claudio Muñoz, presidente de Icare y de Telefónica Chile. «En este clima desfavorable pueden haber influido las dificultades legislativas derivadas de la aprobación tanto del presupuesto nacional como del reajuste salarial del sector público para el año 2019, así como la permanencia de la ‘guerra comercial’ entre Estados Unidos y China», agrega.
Dentro de los componentes sectoriales del IMCE, la mayor caída de expectativas se dio en las empresas de minería, cuyo índice se redujo en casi 12 puntos solo en noviembre. Se trata de un indicador de alta volatilidad que ya había subido 12 puntos en septiembre. Por ello, el sector se mantiene en 52,46 puntos, por sobre el área optimista. Sin embargo, no fue el único sector que corrigió. Los otros tres sectores -comercio, industria y construcción-, pese a que se mantienen por sobre los valores de hace un año, también registraron retrocesos.
«Este comportamiento puede encontrar su explicación en la mantención de la tensión de la llamada guerra comercial entre China y Estados Unidos, las débiles cifras económicas nacionales conocidas en el mes y la volatilidad de las bolsas de Estados Unidos y la local», dice Roberto Perales, gerente de Inversiones en CompassGroup Chile.
«Este débil panorama económico, unido a los ruidos político-sociales del mes, llevaron al indicador a niveles de pesimismo por primera vez en lo que va del año», explica.
El pesimismo constructor
En el caso del Comercio, pese a haber caído en dos puntos, se mantiene en la zona de optimismo, en el que se ha mantenido por 16 meses, con un valor de 53,64 puntos en su indicador sectorial. En cambio, el sector Industria cae de 49,28 a 45,95 puntos, profundizando sus débiles expectativas de mejora económica, acumulando segundo mes consecutivo (y el tercero en el año) en el área pesimista.
No obstante, el sector Construcción cayó de 47,98 a 45,34 puntos, con lo cual no solo se sitúa como el más pesimista de todos los sectores; también es de lejos el que más tiempo lleva en esta zona, con ocho meses consecutivos debajo de la línea neutral que marca los 50 puntos, debido a la percepción de que las expectativas de demanda y del nivel de actividad no son muy altas.