La Junta de Revisión de Inversiones Extranjeras de la Commonwealth confirmó a Codelco por escrito ayer, 3 de marzo, que el gobierno de Australia no tiene objeciones a la compra de Lithium Power International Limited (LPI) y que la transacción cumple con la Ley de Adquisiciones y Absorciones Extranjeras de 1975. Asimismo, la Corte Federal de Australia aprobó hoy 4 de marzo el esquema propuesto del acuerdo, según el cual la subsidiaria de la cuprífera, Salar de Maricunga, adquirirá el 100% de las acciones de LPI. La empresa australiana presentará los documentos ante la Comisión Australiana de Valores e Inversiones (ASIC) mañana 5 de marzo, momento en el cual las acciones de LPI dejarán de transarse en la Bolsa de Valores de Australia (ASX). La compañía será eliminada del listado oficial de la ASX el viernes 15.
Tras estos dos anuncios culmina exitosamente el acuerdo de compra-venta que se dio a conocer a mediados de octubre pasado entre la estatal chilena y LPI, dueña del proyecto de litio en el Salar de Maricunga en la región de Atacama, también conocido como Proyecto Blanco, que se encuentra adyacente a las propiedades mineras de Codelco en dicho salar.
Al respecto, el presidente del directorio de la estatal, Máximo Pacheco aseguró que, “con esta adquisición, estamos cumpliendo con el plan de desarrollo de la estrategia del litio que nos convertirá en uno de los principales proveedores de minerales críticos a nivel mundial. La producción responsable de cobre y litio, que el planeta necesita para viabilizar la transición energética, será nuestra principal contribución a la lucha global contra el cambio climático”.
Desde la cuprífera destacaron que, como se ha explicado a lo largo de este proceso, que se inició hace cinco meses, la compra de LPI permitirá viabilizar el Proyecto Blanco a través de sinergias con los activos y permisos que tiene Codelco en el Salar de Maricunga, lo cual ayudará a desarrollar un proyecto de litio con credenciales excepcionales de sustentabilidad ambiental y de relacionamiento comunitario. La expectativa es que genere valor tanto para Codelco como para Chile y la región de Atacama, en especial para las comunidades vecinas.