(El Mercurio) Dos proyectos legislativos que buscan derogar, por un lado, el impuesto a las emisiones contaminantes (CO {-2} ) y, por otro, el tributo a las ganancias mineras fueron presentados por el Gobierno de Australia.
El primer ministro Tony Abbott instó al Parlamento a abolir el gravamen al carbono para que se reduzcan las tarifas eléctricas de los hogares y pequeños negocios que pagaban indirectamente por esta medida. También quiere derogar el Impuesto a la Renta de los Recursos Minerales, que gravaba desde 2012 con un 30% a las ganancias extraordinarias derivadas de la explotación de carbón y hierro.
Pero, según el gobierno, este no lograba recaudar lo suficiente y su abolición permitirían ahorrar US$ 12.460 millones.