El panorama de negociaciones colectivas en Codelco, particularmente en las divisiones Andina y Codelco Norte, podría alcanzar proporciones considerables, teniendo a la vista la reaparición de un nuevo frente de conflicto: los trabajadores contratistas.
Dirigentes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores Contratistas dijeron ayer que tienen en carpeta el inicio de movilizaciones paralelas a los procesos de negociación colectiva que se deben desarrollar en Andina y Chuquicamata a partir de mediados de octubre próximo, como una medida que busca replantear las demandas que pusieron sobre la mesa en diciembre del año pasado y que luego desembocaron en violentas manifestaciones en Rancagua y Los Andes.
Lo relevante de un eventual conflicto es que se trata de unos 5.000 trabajadores en Andina y otros 12.000 en Codelco Norte, por lo que una eventual huelga paralizaría casi por completo la actividad de la minera estatal. Los trabajadores propios que estarán negociando con la estatal su contrato colectivo suman unos 7.000.
Y las condiciones para una huelga no son lejanas, si se considera que entre las peticiones de los contratistas está nuevamente la petición de bonos por el desempeño de la compañía, lo que según enfatizó el vocero de la coordinadora, Cristián Cuevas, es un compromiso de campaña de la presidenta Michelle Bachelet “y hasta ahora no hemos tenido pronunciamiento de su parte”.
De hecho, dijo que hasta ahora sólo han sido recibidos por los ministros del Trabajo, Osvaldo Andrade, y de Minería, Karen Poniachik, además del presidente ejecutivo de la estatal, José Pablo Arellano, aunque no han tenido acercamientos mayores. Dijo que la presidenta Bachelet no ha respondido a la petición realizada en varias oportunidades en actividades a las que ha asistido.
Cuevas dijo que los puntos que les interesa reflotar están relacionados con cumplir parte de los acuerdos alcanzados en enero y febrero pasado, los que a su juicio se han retardado. Además, dijo que intentan defender el derecho de los trabajadores contratistas para ser internalizados en algunos procesos de la compañía, como lo determinó la ley de subcontratación. Por último, lo más relevante a su juicio es que se les considero en el pago de bonos por productividad en mecanismos similares a los trabajadores de planta, pues el trabajo que realizan es el mismo, según defendió.
Un dato no menor es que los contratistas de Andina firmaron esta semana una alianza de apoyo estratégico con el Sindicato Unificado (que agrupa alrededor de 650 mineros contratados) para abordar parte de su problemática -una de las principales habla de diferencias en el trato- con la administración.
Y las acciones de los contratistas ya se iniciaron. El lunes en la noche un grupo de trabajadores se tomó un camino de acceso a Andina retardando el ingreso de los trabajadores del último turno.
La visión de Codelco
Una alta fuente de la estatal salió al paso ayer de las pretensiones de los contratistas. De partida la visión al interior de la cuprífera “no es de preocupación”, según definió. Esto porque la compañía cree que se han cumplido a cabalidad todos los compromisos adoptados bajo la mesa tripartita, donde participan la estatal, las empresas contratistas y la Coordinadora de Trabajadores Contratistas.
Aunque reconocen que en la relación no todo “son flores”, recalcaron que se han hecho cargo de procesos que han mejorado las condiciones laborales de estos trabajadores, por lo tanto ven como “extemporáneo e incongruente” la aspiración de los subcontratistas de rebrotar el conflicto. Es más, recalcan que por estos días y luego de realizar visitas y trabajos en todas las divisiones, están preparando la reunión final con la mesa tripartita central para dar por cerrado el proceso.
En la estatal creen que es poco lo que se puede seguir avanzando con los contratistas, considerando que la homologación a la que aspiran, ni siquiera se ha logrado al interior del cuerpo contratado de la corporación, y además ya se negó la entrega de un bono en una primera movilización. Y puntualizan que detrás de este nuevo rebrote está fundado en elementos del tipo políticos, más que de la empresa.
Asambleas de sindicatos de Andina
El proceso de negociación colectiva de Andina, que engloba a alrededor de 1.000 trabajadores de los sindicatos Unificado (650) y de Integración Laboral (350) ya comienza a tomar forma. El presidente del sindicato unificado, Manuel Cañas, dijo ayer que han avanzado en el petitorio que harán a la compañía y que corresponde entregar a mediados de octubre. Ayer realizaron dos asambleas con socios donde comenzaron a presentar algunos detalles, aunque dijo que hasta ahora todavía no hay determinaciones en cuanto a petición de reajustes y bonos.
Andina debe negociar desde mediados de octubre y durante todo noviembre su contrato colectivo. A mediados de noviembre se topará con el inicio el proceso en Chuquicamata, donde unos 7.000 trabajadores de los sindicatos 1, 2, 3 y 5, entregarán su primera propuesta para renovar el contrato que expira el 31 de diciembre.
Fuente / El Diario