Trabajadores de Escondida dijeron el martes que las negociaciones con la empresa se encuentran en un punto muerto y que podrían votar una huelga a fin de mes si no obtienen una respuesta positiva a sus demandas salariales.
Un representante del sindicato de Escondida, que agrupa a más de 2.000 personas, dijo a Reuters que la producción de la mina habría disminuido en un 10% en lo que va del mes, debido a que están realizando las faenas de manera más lenta de lo habitual en un intento por presionar a la empresa.
Sin embargo, portavoces de la angloaustraliana BHP Billiton, controladora de Escondida, dijeron que el accionar de los trabajadores sólo tendría un impacto mínimo en la extracción del mineral y que tenían las suficientes reservas como para no afectar la producción.
«El ambiente se complicó más porque la empresa (…) nos paga el último bono de producción que está en el contrato colectivo reducido en un 20%», dijo Pedro Marín, secretario del sindicato de Escondida.
«Está fea la cosa. No hay acercamiento, no hay negociación todavía (…) Parece que vamos derechito (a la huelga)», agregó.
Según Marín, la empresa realizaría su última oferta el 25 de este mes, mientras que el día 28 sería votada la paralización.
Los trabajadores exigen un aumento salarial de un 13%; además de bonos totales por 16 millones de pesos por trabajador que incluyen beneficios por los actuales valores del cobre y mejoras en coberturas de salud y educación.
Escondida, por su lado, ofrece un reajuste real de un 1,5%, más el pago de 4,5 millones de pesos en créditos y bonos por trabajador.
La mina negoció el último contrato con sus trabajadores, que vence el 2 de agosto, hace tres años, cuando los precios del cobre bordeaban los 67 centavos de dólar por libra, muy inferior a la actual cotización del metal rojo.
El martes el cobre cerró en US$3,64235 por libra en la Bolsa de Metales de Londres.
Fuente/El Mercurio