Si comparamos a la Empresa Nacional de Minería, Enami, del año 2000 con la actual, encontraremos una notable diferencia.
No sólo gracias a los elevados precios del cobre, que ayer marcó un nuevo récord a US$ 227.136 en la Bolsa de Londres, sino que a través de la productividad, es que la empresa ha prosperado cerrando el 2005 con un total de 87 millones de dólares en compras de mineral a la pequeña minería, sino que también como fruto de las buenas gestiones comerciales y operacionales que ha desarrollado Enami.
Así lo explicó el gerente de fomento productivo, Gustavo Gallo, que dijo que el sector se ha reactivado, mientras que en cifras, de esos 87 millones, son 27.8 los que aporta la Región de Atacama en ventas de sus productores.
«Nosotros el 2004 compramos 50 millones de dólares, el 2005 cerramos comprando 87, esa es la venta de toda la minería pequeña en el país y cuando digo que hay una mayor venta digo que hay una reactivación del sector que nos tiene sobre abastecidas las plantas de Enami, es decir, ha habido una reactivación, cuando hablamos de 400 productores que teníamos en el 2003 a casi 900 hoy día, quiere decir que hemos duplicado la venta de los productores en forma significativa», expresó Gallo.
PROYECTOS
En tanto, esta buena racha se debe aprovechar y como, según explicó el gerente, existe un compromiso en no retirar el dinero de las utilidades, se ocupará invirtiendo en diferentes proyectos en todo Chile con un total de 60 millones de dólares en inversión.
En Atacama específicamente, se pretende duplicar la cantidad de beneficio en la Planta de Electroobtención de El Salado, en Paipote ampliar la capacidad a 60 mil toneladas más de fusión y construir un símil de la planta de El Salado en Vallenar, pero con menor capacidad debido a que en esa zona no existe un potencial minero tan fuerte hasta ahora.
Incluso, la dificultad en Vallenar apunta a que deben obtener alguna reserva de mineral para asegurar que podrán procesar por allí lo extraído sin ir a pérdida, ya que no es el mismo caso que en El Salado donde el mineral procesado proviene de una mina propia. Sin embargo, el potencial más alto en Atacama está en Paipote, por lo cual, es allí donde se abocan los mayores esfuerzos para continuar creciendo.
«Hoy día el gran desafío de Paipote es crecer, el proyecto ya está confeccionado y es nuestro principal atractivo, por ello la idea es proyectarlo con mayor capacidad de fusión», comentó Gallo.
Enami está actualmente casi saneada y sus proyecciones son altas, por tanto, el desarrollo de los proyectos en Atacama tendrán gran beneficio para los más de 400 pequeños mineros que existen en la región.
Fuente/El Diario de Atacama