Atacocha, la quinta mayor productora de zinc y la segunda de plomo de Perú, empezará a construir en el año 2006 un gran depósito de relaves con una inversión de hasta 15 millones de dólares en unos cuatro años.
Un depósito de relaves (residuos de explotación) es vital para la producción de una mina. Atacocha firmó hace dos semanas un contrato de opción de compra de una «interesante» compañía polimetálica que procesa 200 toneladas de minerales al día, según señaló el gerente general de Atacocha, Juan José Herrera.
«Estamos estudiando construir unas seis canchas de relaves. El próximo año esperamos hacer una de gran espacio, con una capacidad para unos 20 a 25 años,» dijo Juan José Herrera a Reuters en una entrevista.
«Un proyecto de relaves puede estar desarrollándose en unos cuatro a cinco años y la inversión estará en el orden de entre los 10 a 15 millones de dólares en ese lapso,» agregó.
La empresa corrió el riesgo de cerrar su mina en el 2004 luego que dirigentes del poblado andino de Ticlacayán no aceptaron un pacto que líderes anteriores firmaron en abril cediendo a la compañía 28 hectáreas para que amplíe un depósito de relaves.
Para salvar la mina, Atacocha -que opera en la región Pasco a 315 kilómetros al este de Lima- negoció con el poblado vecino de Cajamarquilla que autorizó usar 13 hectáreas de su zona para la construcción de un nuevo depósito, que fue terminado en octubre.
«Ese fue un depósito de emergencia, de bajo rendimiento para dos años. Estamos en la segunda etapa con dos pozos, se acabará a fin de año. Los que planeamos serán grandes,» acotó.
Atacocha produjo el año pasado unas 105.895 toneladas métricas secas (TMS) de concentrado de zinc, 44.702 TMS de concentrado de plomo y 5.434 TMS de concentrado de cobre, que prevé «mantener similar» al cierre del 2005, añadió Herrera.
Perú es el tercer productor mundial de cobre y zinc; y el cuarto de plomo.
PREOCUPADOS POR 2006 ELECTORAL
La compañía evalúa comprar las acciones de Sinaycocha, dueña de concesiones polimetálicas de 4.500 hectáreas en la región andina de Junín (a 320 kilómetros al este de Lima) tras firmar el contrato de opción de adquisición con su subsidiaria, la Corporación Minera San Manuel S.A, según el ejecutivo.
«Algo interesante debe haber ahí. Sinaycocha tiene plomo, plata, zinc, cobre. Lo veo interesante pues en el mercado sigue habiendo una necesidad de esos metales. China necesita y eso genera expectativa. Todos están buscando alternativas de negocios y mejor que sea aquí que en el extranjero,» añadió.
«Pero el tema es lo que viene en el 2006, un año electoral, preocupa la gran diversificación política que hay. Y pese a que los indicadores dicen que hay falta de metales afuera, que es bueno para el productor, nada muestra que hay grandes proyectos en el corto plazo, por lo que los precios pueden caer,» dijo.
La Bolsa de Valores de Lima llegó a bajar el viernes un 5,16 por ciento, la mayor caída del año, por la incertidumbre prelectoral ante las elecciones presidenciales de abril y el aumento del riesgo país por el ascenso en los sondeos de un militar retirado.
«En el 2005 la minería tuvo problemas sociales que impiden decir que fue un año excelente. Los precios fueron buenos, pero socialmente fue duro. Con responsabilidad compartida de firmas, gobierno y pueblo el 2006 sería menos tortuoso,» dijo Herrera.
El sector minero -motor de la economía porque aporta más de la mitad de divisas por exportaciones- sufre desde el 2003 una ola de protestas sociales que aducen contaminación, que el año pasado causaron la paralización de dos proyectos de oro en Perú.
Fuente/Reuters