La desalación se consolida como solución clave frente a la escasez hÃdrica, gracias a tecnologÃas que optimizan el uso del recurso y el manejo de residuos. El agua desalada se ha convertido en un habilitante de los procesos mineros en Chile, reduciendo la presión sobre fuentes continentales, especialmente en las regiones de Tarapacá, Antofagasta y Atacama.
Sin embargo, a pesar de sus múltiples beneficios, desde el lado ambiental se cuestionan principalmente los vertidos de salmuera que resultan del proceso de desalación, pese a que se ha ido logrando mitigar los riesgos para los ecosistemas marinos que pudieran generar estos residuos. Es asà como estudios muestran aumentos de salinidad menores al 5% a 100 metros del punto de descarga, atenuados por la Corriente de Humboldt y la geografÃa costera. Los difusores submarinos dispersan la salmuera uniformemente, reduciendo impactos en la vida marina.
Con la finalidad de minimizar todavÃa más el impacto ambiental, se está estudiando una solución circular: la minerÃa de salmuera o brine mining, que recupera sales y minerales del subproducto de la desalación, aumentando la sostenibilidad del proceso al generar valor a partir de un residuo.
Domingo Zarzo, director de Proyectos Estratégicos y Relaciones Institucionales de Sacyr, explicó que «el sector de la desalación está concentrando sus esfuerzos en incrementar la sustentabilidad de los proyectos, más que en el desarrollo de nuevas tecnologÃas. Está claro que las salmueras de desalación son una potencial fuente de proyectos e investigaciones que incrementen la economÃa circular en la desalación, sea por medio de la producción de energÃa (energÃa renovable azul), por la producción de productos quÃmicos y sales (brine mining), con proyectos relacionados con captura de CO2 o con la reutilización de componentes tales como membranas o cartuchos».
Relevante iniciativa
Desde el año 2021, Sacyr lidera el proyecto «Life HyReward» -financiado por la Unión Europea en el programa LIFE-, en el que se utiliza la salmuera procedente del proceso de ósmosis inversa de agua de mar como corriente de alimentación de alta salinidad y agua residual tratada como corriente de baja salinidad. La unión de las dos posibilita la generación de energÃa eléctrica. La primera fase experimental de este proyecto se desarrolló en la planta desaladora de Alicante (España).
Domingo Zarzo explicó que gracias a este proyecto «hemos conseguido producir más de 0,3 Kw-h/m3 en planta piloto (pero con un potencial mucho mayor) a partir del gradiente salino entre salmuera de desalación y una fuente de agua dulce (que en nuestro caso es agua residual tratada), al introducirlos en una electrodiálisis reversa (RED), lo cual supone una reducción de más del 10% del consumo energético de una desaladora y unas ventajas adicionales como la dilución de ambas corrientes».
Zarzo añadió que «la integración de energÃas renovables en el campo de la desalación es crucial para la descarbonización del sector del agua, ya que más del 50-60% del coste de producción de agua desalada proviene de la energÃa. Pero la desalación en sà misma, realizada de modo sustentable, reduce la presión sobre los recursos de agua continentales (subterráneos y superficiales), y genera nuevos recursos a partir de una fuente inagotable como es el mar».
El avance de la desalación permite liberar aguas continentales para consumo humano y ecosistemas. Para 2034, se estima que el 66% del agua utilizada por la minerÃa del cobre provendrá del mar, reduciendo en casi 37% el uso de agua continental.
Zarzo relevó el hecho que «Chile está avanzando rápidamente en el crecimiento de diversos programas y proyectos de desalación y reúso en diferentes regiones, ya no sólo para el sector minero sino también multipropósito, como la recientemente adjudicada desaladora de Coquimbo, por lo que puede y debe beneficiarse de todos los avances en materia de sostenibilidad del sector. Adicionalmente, la tecnologÃa desarrollada podrÃa utilizarse para producir energÃa a partir de corrientes salinas del sector minero, que podrÃan superar incluso el potencial de producción de energÃa de las salmueras de desaladorasâ€.
AsÃ, el paÃs se posiciona a la vanguardia de la innovación hÃdrica y ambiental, demostrando que sostenibilidad y desarrollo económico pueden avanzar en conjunto, transformando la salmuera en una oportunidad real de economÃa circular y tecnologÃa limpia. Casos exitosos como este serán presentados en el próximo Congreso Acades 2026.