(Diario Financiero) Más de dos años de trabajo que involucraron el estudio y análisis de 17 universidades iberoamericanas de la RedEmprendia, -organización que promueve la innovación y el emprendimiento universitario responsable-, dieron origen al libro “Investigación + Desarrollo + Innovación + Emprendimiento (I+D+i+e) en universidades de Iberoamérica†del profesor de la Escuela de IngenierÃa UC, Alfonso Cruz, el cual busca medir y caracterizar los sistemas de I+D+i+e de estas instituciones y entregar recomendaciones para su fortalecimiento.
Según Cruz, se trata de materias de creciente relevancia mundial por su impacto en el desarrollo económico y social de los paÃses. Comenta que para las universidades representa un gran desafÃo ya que, a la misión de educar y desarrollar investigación cientÃfica, se suma la necesidad de transferir conocimiento para contribuir a resolver los nuevos problemas que enfrenta la sociedad y su desarrollo.
El estudio se hizo en base a un modelo con 42 indicadores agrupados en 15 variables y cuatro ejes: capital humano avanzado, recursos e Infraestructura, institucionalidad y servicios y resultados y formación de capacidades; a fin de identificar patrones que permitieran recopilar el aprendizaje de la red en esta materia. “A pesar de la heterogeneidad de las instituciones estudiadas, existen diversos elementos comunes que nos permitieron llegar a conclusiones interesantes y entregar recomendaciones especÃficas sobre cómo potenciar estas actividadesâ€, destaca.
I+D+i+e en Chile

La muestra contempló 17 universidades de seis paÃses, pero sólo la UC representa a Chile, esto pues, era la única entidad local presente en esta Red al inicio del estudio. Hoy también participa la Universidad de Chile. 
En su primer capÃtulo, el libro hace referencia al estado de la I+D en el mundo y a nivel de los paÃses de Iberoamérica. Señala Cruz que la calidad de la ciencia chilena destaca en la región, sin embargo, su volumen es pequeño y un porcentaje menor de esa investigación genera desarrollos tecnológicos que logran ser transferidos a la industria en la forma de innovaciones y nuevos emprendimientos.
“Desde hace varios años diversas autoridades nacionales han planteado el anhelo de hacer de Chile un polo de innovación en América Latina. Sin embargo, si uno ve las cifras se da cuenta que estamos muy lejos de ello. Por ejemplo, Brasil destina un 1.2% de su PIB a la I+D, nosotros apenas un 0,45% y, a pesar que hemos tratado de incrementar esta cifra y llegar al 1%, prácticamente no ha variado en los últimos diez años. Si no logramos incrementar significativamente nuestras capacidades como paÃs para generar nuevo conocimiento tecnológico y transferirlo a la industria vamos a seguir exportando materias primas lo cual limita seriamente nuestro desarrollo futuroâ€, advierte el experto.

