(La Tercera)Sin sorpresas se llevó a cabo ayer en Londres la junta extraordinaria de accionistas donde Anglo American Plc aprobó el incremento en su participación accionaria en la productora de diamantes De Beers, que era el único punto en tabla.
Pese a las expectativas, y tras no más de 16 minutos de reunión, la disputa que actualmente mantiene Anglo American con la estatal chilena Codelco por el 49% de la propiedad de Anglo American Sur (AAS) no fue tratada en la reunión, donde participaron los principales accionistas de la minera británica.
En Anglo esta situación se interpretó como un respaldo a la estrategia con que la administración ha enfrentado a Codelco, luego que en noviembre -y tras el anuncio de la estatal chilena de que ejercería su opción sobre AAS- esta decidiera vender en US$ 5.390 millones el 24,5% de la propiedad del yacimiento a Mitsubishi, lo que desencadenó el conflicto que los tiene enfrentados en tribunales.
Anglo American posee el 75,5% de las acciones de Anglo American Sur (AAS), que está compuesta por los yacimientos de cobre Los Bronces y El Soldado, que producen unas 225 mil toneladas de cobre fino al año, y la fundición Chagres.
El 99,94% de los accionistas de Anglo American aprobó la adquisición de un 40% adicional de la firma De Beers en US$ 5.100 millones a la familia Oppenheimer, con lo que Anglo se quedó con el 85% de la propiedad. El otro 15% es propiedad del gobierno de Botswana.
La minera espera cerrar la operación durante el segundo semestre de 2012, una vez que obtenga las autorizaciones de los reguladores y del gobierno.
Sigue la pelea
En Chile, la batalla legal entre ambas firmas continúa con diversos recursos en tribunales.
La semana pasada, Anglo American presentó una demanda contra Codelco por incumplimiento de contrato, señalando que esta se había adelantado en ejercer su opción. A principios de esta semana, Codelco notificó a Anglo del ejercicio de su opción por el 49% del yacimiento.
La próxima semana, la estatal chilena presentará ante la justicia otras dos demandas: una por incumplimiento de contrato, donde pedirá que Anglo American respete el acuerdo alcanzado en 2002, y otra de nulidad de contrato, donde incluirá a Mitsubishi, que busca dejar sin efecto la operación por la cual la japonesa entró a la propiedad de AAS.
Fuente /La Tercera