(Pulso) La idea que circula en las altas esferas de Gobierno es que la próxima semana el Gobierno logre finiquitar, o al menos dejar casi listo, un acuerdo polÃtico que permita destrabar el debate de la Reforma Laboral, facilitando su aprobación express desde el Congreso. Si se cumple ese ideario, el proyecto podrÃa estar despachado a ley durante la tercera semana de marzo, lo que neutralizarÃa el paro nacional convocado por la Central Unitaria de trabajadores (CUT) para el dÃa 22 de ese mes.
Hasta ahora el camino para llegar a consenso estarÃa bien avanzado al interior de la Nueva MayorÃa. “Pese a la negativa señal que se dio con la postergación para marzo, en la última semana de enero y en otras conversaciones han habido avances para un acuerdoâ€, asegura una alta fuente del oficialismo involucrada en las negociaciones con el Gobierno.
Seis son los temas en controversia. A continuación el estado de avance de cada uno de ellos:
1. Reemplazo en huelga: La Comisión de Trabajo del Senado en diciembre rechazó la indicación del Gobierno que permitÃa al empleador realizar las “adecuaciones necesarias†del personal que no se encuentra en huelga. Trabajo y Hacienda trabajan ahora en una propuesta que mantenga el espÃritu de las adecuaciones, es decir, las facultades de administración de la empresa y la libertad de trabajo de los que no están paralizados. Esto permitirÃa “reordenar†a los trabajadores, modificando sus horarios, pero sin que ello implique realizar labores distintas a las habituales. Con ello, dicen en la NM, se respetarÃa la huelga efectiva, sin reemplazo. Trascendió que los senadores dÃscolos de la DC en un principio apoyarÃan la nueva propuesta del Ejecutivo.
2. Extensión de beneficios: Hay consenso en una polÃtica de extensión a los no sindicalizados entre el sindicato y su empleador, que quedarÃa pactada durante el proceso de negociación colectiva. También en extender el IPC cuando el empleador ofrezca ese guarismo en la primera respuesta al proyecto del sindicato. Asimismo, para reducir los riesgos de que esta norma se caiga en el Tribunal Constitucional (TC), se buscarÃa que el traspaso de los beneficios por afiliación al sindicato sea con consulta a la empresa. Aún no hay acuerdo con el sector de los “prÃncipes†de la DC, que ha abogado por abrir espacios a la extensión universal.
3. Sindicato interempresa: Es otra de las materias donde todavÃa se mantienen diferencias. Hasta ahora el Gobierno acotarÃa la titularidad, siempre que la negociación se haga con los delegados de los trabajadores de la empresa y en esta sede.
4. Descuelgue o reintegro de trabajadores en huelga: El proyecto original eliminada el descuelgue de la huelga. Sin embargo, tras las presiones del empresariado y de los sectores más moderados de la Nueva MayorÃa, el Ejecutivo presentó en el Senado una indicación que reponÃa la salida individual del paro, aunque con plazos diferenciados según el tamaño de la empresa. La CUT planteó reparos a esta propuesta y como parte de la “transación†de la negociación, el Ejecutivo cederÃa y rebajarÃa el número de dÃas para que se produzca el descuelgue.
5. Reemplazo de la mandante en caso de huelga en firma subcontratista: Esta propuesta también fue rechazada por la Comisión de Trabajo. Como válvula de salida, ha cobrado fuerza la idea de retirar dicha norma del articulado de la Reforma Laboral, manteniendo sólo en el ámbito civil y comercial las facultades de administración de la mandante en el evento de una huelga en la subcontratista.
6. PerÃodo de vigencia de la ley: Hay cierto nivel de consenso en que la implementación de la reforma se cambie de los 8 meses establecidos como de transición, a un perÃodo menor que serÃa entre siete y seis meses.

