(Pulso/Bloomberg) Las perspectivas de reducciones de impuestos en Estados Unidos y alzas en las tasas de interés están quitando parte del brillo al oro, según BlackRock Inc.
Las probabilidades de una reforma tributaria han aumentado desde fines del verano, y un recorte “podría socavar el oro” al ayudar a impulsar las tasas de interés ajustadas a la inflación marginalmente al alza debido a un mayor crecimiento económico, mientras se reduce la incertidumbre política, dijo Russ Koesterich, administrador de dinero de la firma. Él también espera un dólar más firme, lo que eliminaría soporte para el metal.
El alza del oro, que ha puesto al metal en curso para registrar el mejor año desde 2010, ha flaqueado este trimestre en medio de la preocupación de que tasas más altas reducirán el atractivo de los activos que no generan intereses.
Mientras que BlackRock dijo que todavía hay buenas razones para mantener cierta exposición al oro, incluida la diversificación, JPMorgan Chase & Co. es bajista para el oro en el corto plazo.
El banco espera que la Reserva Federal suba las tasas en cinco ocasiones hasta diciembre de 2018, impulsando un ascenso en las tasas reales, según una nota a clientes el martes. JPMorgan dijo que tiene posiciones cortas en los futuros del oro en la Comex para entrega en diciembre y espera que el metal caiga a un promedio de US$1.240 la onza en el primer trimestre. Ayer, el metal precioso cerró la jornada en el nivel de US$1.291,75 por onza.
Los precios subirán a un promedio de US$1.350 en el cuarto trimestre, pronostica el banco. “Si bien la debilidad del dólar y la escalada de las tensiones políticas podrían prestar cierto apoyo a los precios del metal, seguimos advirtiendo cautela contra mantener oro como cobertura política durante el ciclo de normalización de las tasas globales”, dijeron los analistas.
La precaución sobre el oro no es compartida por todos en el mercado. El oro tocó fondo y podría superar los US$5.000 la onza en cinco años, a medida que los inversionistas buscan rendimientos en medio de un período prolongado de dinero barato y utilicen el metal como un refugio del riesgo geopolítico y financiero, dijo durante esta semana Rob McEwen, máximo ejecutivo de McEwen Mining Inc.