(Diario El Día) Un incremento en el número de faenas mineras ilegales o clandestinas se estaría produciendo en la región a raíz de la aplicación de las nuevas normas en materia de seguridad impuestas por el Gobierno, según se denuncia en esta industria, algo que habría quedado de manifiesto el viernes pasado con la muerte de 4 pirquineros en una mina no autorizada.
Ese día, los trabajadores pretendían desaguar una mina abandonada. Para ello metieron a la galería subterránea una motobomba a gasolina, olvidando instalar un sistema de ventilación adecuado. Producto de la acumulación de monóxido de carbono, finalmente, los pirquineros que trabajaban en el lugar fallecieron envenenados por este gas tóxico.
Stella Segura, presidenta de la Asociación Minera de Ovalle, ya en octubre del año pasado sostenía que los cambios normativos que se introdujeron después del accidente en la mina San José, en 2010, estaban induciendo a muchos pequeños mineros a trabajar en la ilegalidad, ya que las exigencias impuestas son muy altas. La dirigenta indica que los productores se sienten “presionados”, especialmente porque, a su juicio, Enami no les otorgará un padrón para comprarles mineral si no cuentan con un certificado de Sernageomin, documento que se obtiene sólo una vez que la mina está regularizada y cumpliendo, entre otras, con normas de seguridad, higiene y medio ambiente. De este modo, indica que la necesidad de trabajar, lleva a muchos a “la clandestinidad”.
Al respecto, la seremi de Minería, Jocelyn Lizana, rechaza esta lectura, indicando que de acuerdo a sus catastros, a la fecha existirían unas 2.000 faenas en la región, de las cuales unas 300 ya cuentan con todos los permisos y que el resto estará regularizada antes de 2014, según lo programado.
De igual manera, aseguró que Enami entregará padrones a todos los productores que hayan, por lo menos, manifestado su intención de regularizarse.
Fuente / Diario El Día