Formando hoy el capital humano del futuro

Abr 14, 2023

La educación inicial cumple un rol fundamental para los seres humanos, ya que tiene un impacto social, personal, cultural e incluso económico, siendo un factor para abordar desafíos como la desigualdad, la pobreza, la exclusión. Durante los primeros años de vida, el cerebro experimenta cambios significativos a partir de la construcción de estructuras cognitivas y […]

La educación inicial cumple un rol fundamental para los seres humanos, ya que tiene un impacto social, personal, cultural e incluso económico, siendo un factor para abordar desafíos como la desigualdad, la pobreza, la exclusión.

Durante los primeros años de vida, el cerebro experimenta cambios significativos a partir de la construcción de estructuras cognitivas y afectivas, que son fundamentales para el crecimiento, aprendizaje que se adquiere en un entorno íntegro y con una crianza adecuada. Cuando estos elementos no están presentes, el infante corre el riesgo de sufrir daños en distintas funciones del cerebro, según se señala en la revista Pedagogía en Educación Parvularia, de la Universidad Mayor.

En Antofagasta unos 23 mil niños, de entre 0 y 6 años, son atendidos en distintas salas cunas y jardines infantiles. Estos corresponden al primer espacio público o privado al que acceden los párvulos, y constituye un lugar muy importante dado, que posibilita un aprendizaje significativo por los diversos estímulos que se pueden recibir, lo que va configurando -desde los primeros años de vida- la identidad y forma de habitar el mundo.

En la Asociación de Industriales de Antofagasta somos conscientes de ello, y contamos con un Plan Estratégico de Educación Inicial en el que ejecutamos distintas iniciativas, como los programas Construyendo Valor Social y Apadrinamiento de Jardines Infantiles; seminarios, charlas comunitarias, así como las fiestas Los niñ@s son nuestro norte y la comunitaria de Navidad, todo gracias a la alianza público-privada para una mejor formación del capital humano del futuro.

Son los equipos educativos los que facilitan el desarrollo de competencias cognitivas, afectivas y de interacción social, recayendo en los docentes y las familias la gran responsabilidad de brindar oportunidades por igual. Desde sus inicios el Programa Construyendo Valor Social ha velado por capacitar a los profesionales, entregando herramientas socioemocionales que refuerzan el perfil de acompañamiento y favorecen, de manera sustancial, la formación inicial de niños en nuestra región.

Hoy enfrentamos múltiples desafíos en esa materia: el mayor costo promedio nacional por pago de atención en salas cunas, lo que limita un acceso más igualitario de los infantes para el desarrollo de habilidades cognitivas y afectivas; hasta la falta de oportunidades de especialización que tienen las educadoras, para enfrentar los desafíos que hoy demanda la sociedad, como, por ejemplo, el trastorno de espectro autista o la educación no sexista desde la temprana edad.

El llamado, entonces, es a seguir trabajando mancomunadamente en alianza público-privada optimizando los esfuerzos y compromisos, ya que está probado que potenciando la educación inicial es cuando las inversiones y aportes generan la mayor rentabilidad social. Pues, en efecto, los niños no son el futuro de nuestra región, sino el presente que hace posible que se construya una mejor calidad de vida para quienes son la base de nuestra nación.

Natalia Femenías Navea, subgerenta de Oportunidades y Nuevos Negocios de la AIA

Subgerenta de Oportunidades y Nuevos Negocios de la AIA.

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