Creado en 1980, el Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin) es el organismo técnico responsable de generar información geológica básica y de peligros geológicos, así como de regular y fiscalizar el cumplimiento de normativas mineras en materia de seguridad, propiedad y planes de cierre.
Consultados los socios de Voces Mineras sobre este doble rol que tiene la institución, una amplia mayoría estimó necesario generar una discusión amplia sobre su función y estructura, buscando optimizar su trabajo.
Según revelaron en Voces Mineras, el 75% de los socios que respondieron la consulta se inclinó por la opción de convocar a expertos tanto del ámbito público como del privado para analizar la posibilidad de reestructurar el Sernageomin, con sus ventajas y limitaciones, o de mantener su estructura sin cambios, dotándolo de mayores recursos financieros y mejorando la selección de sus directivos.
En ese sentido, se planteó la necesidad de evaluar el actual aporte que hace la institución y qué se espera de este servicio para el desarrollo de una minería sustentable, y, en función de ello, analizar y proponer la mejor organización para alcanzar tales objetivos.
En tanto, un 25% de los consultados dijo parecerle razonable dividir al Sernageomin en dos servicios independientes: uno que se dedique exclusivamente a la gestión minera (una Superintendencia de Minería, por ejemplo) y otro que se dedique al conocimiento geológico (un Servicio Nacional de Geología).
Una propuesta que quedó sobre la mesa
Durante el segundo periodo presidencial de Sebastián Piñera se consultó a diversas organizaciones gremiales sobre los efectos que tendría una modificación del Sernageomin.
El Instituto de Ingenieros de Minas de Chile (IIMCh) y el Colegio de Geólogos analizaron en profundidad, y durante varias sesiones, la conveniencia o no de reemplazar esta institución por dos servicios independientes y que reporten a ministerios diferentes. Entonces, se propuso al gobierno la creación de una Superintendencia de Minería (SupMin), que reporte al Ministerio de Minería, y un Servicio Nacional de Geología (SerGeo), dependiente del Ministerio de Ciencias.
La SupMin mantendría todas las responsabilidades esenciales a la gestión minera nacional, incluyendo el control de estados de seguridad en la actividad minera, la revisión y aprobación de proyectos mineros integrales (mina-planta-infraestructura), así como el desarrollo de capacitación de trabajadores para la adopción de tecnologías modernas y de alta productividad.
El SerGeo, por su parte, mantendría la información geológica nacional, apta para definir políticas de Estado y para la evaluación de peligros geológicos trascendentales, como terremotos, tsunamis y otros.
“Este informe fue entregado al Ministro de Minería y Energía de la época, pero se adujo que el gobierno tenía otras prioridades”, recordó Juan Rayo, a quien le tocó liderar la evaluación como cabeza del IIMCh en su momento.
Hoy, como presidente de Voces Mineras, hace ver que el tema sigue vigente y que, enfrentados a un nuevo ciclo electoral –por las elecciones presidenciales y parlamentarias del próximo año– debiera volver a ponerse sobre la mesa.
En ese sentido, Rayo adelantó que la asociación organizará un foro sobre esta temática, que se realizaría en abril del próximo año.