Despreocupación en temas clave como el energético y de aguas, falta de claridad en el destino de los fondos del royalty, escasez de un enfoque prioritario al fomento de la mediana minería y carencia de políticas que incentiven la exploración, son las principales críticas que el Instituto de Ingenieros en Minas de Chile (IIMCH) hace a la autoridad mientras preparan su cumpleaños N° 75.
Con más de siete décadas de experiencia en el «día a día» del sector minero, en la entidad aseguran que los principales problemas del sector, y que no han sido abordados seriamente, son la carencia de agua para los yacimientos mineros y la escasez de energía que afectará al Norte Grande desde 2008 en adelante.
Por ello es que aseguran que la industria y el Gobierno debieran acercarse para resolver estos inconvenientes que incrementarán de forma importante los costos de las grandes compañías.
Para el IIMCH, una de las posibles soluciones para ambos problemas podría provenir de los fondos del royalty 2. «Hay que darle una orientación estratégica a dichos fondos», dice el presidente de la entidad, Leopoldo Contreras, quien agrega que no sirve destinar estos recursos de forma indiscriminada sin tener una línea que seguir.
Para Contreras la política minera del Bicentenario impulsada por el Gobierno, es sólo un camino a seguir y no un documento con temas concretos como el fomento a la pequeña y mediana minería. Asegura que hace falta una política que incentive la exploración minera -«similar al DL 600 que se hizo alguna vez», dice- además de volver a «enfocar» a la Enami en la promoción de prospectos.
Para Contreras, uno de los factores clave para masificar la actividad minera es crear un escenario adecuado para que las empresas puedan transarse en la Bolsa. Según explica, aún los inversionistas locales consideran muy riesgoso el negocio minero, dado que incluso en términos financieros los bancos son reticentes a esta actividad.
Fuente / El Mercurio