(Diario Financiero) Una semana antes del fin del plazo establecido (31 de julio), Codelco ingresó el primer set de respuestas a las consultas efectuadas por la autoridad al Estudio de Impacto Ambiental (EIA) del proyecto de expansión de su división Andina, conocido como 244, que está ubicada en la zona cordillerana de las regiones Metropolitana y de Valparaíso.
El trámite de la iniciativa estuvo suspendido casi un año, luego que la estatal recibió más de 2.000 observaciones.
Andina 244 es uno de los proyectos estructurales de Codelco y demandará una inversión por sobre los US$ 6.800 millones para una producción anual estimada en 600 mil toneladas de cobre fino.
La minera planteó una serie de adecuaciones a la iniciativa, la más importante de ellas es un cambio en el diseño del rajo de la mina, con el objeto de reducir impactos sobre glaciares de roca, con lo cual las excavaciones afectarán a cinco y no seis de estas formaciones.
Asimismo, asegura que los glaciares blancos que están en las cuencas aledañas de los ríos Blanco, Mapocho y Maipo no se verán afectados por la operación ni por el material particulado, lo que se garantizará con un programa de estudio y seguimiento durante la vida útil del proyecto, estimada en 65 años.
“Hemos cambiado la configuración de la mina a cielo abierto, lo que nos permite reducir el número de glaciares de roca que afectaremos parcialmente. De acuerdo a lo solicitado por el SEA, hicimos un nuevo estudio de dispersión de material particulado en el área cordillera, el que ratifica los resultados de nuestro estudio anterior en orden a que no vamos a impactar a los glaciares blancos”, señaló Gerhard von Borries, vicepresidente (I) de Proyectos de Codelco.
Otro de los puntos cuestionados durante la tramitación ambiental fue el uso del agua. Codelco señaló que reutilizarán 2/3 del recurso, comprometiéndose a mejorar las aguas del río Blanco, a tratar las de contacto en una planta (lluvias, nieve, deshielos naturales y otros) y devolverlas al cauce del río, y establecer un plan de seguimiento de su calidad.
Respecto de la flora y fauna, Codelco propuso el desarrollo de un corredor biológico como medida de compensación ambiental para ecosistemas como el parque Andino Juncal; Quebrada el Durazno; Guayacanes-El Sauce; y humedal de Mantagua, en Quintero.
Sobre la relación con la comunidad, la firma implementará planes de capacitación y dará oportunidades laborales en la zona.
Felipe Guevara, alcalde de Lo Barnechea, uno de los opositores a la iniciativa señaló que Codelco por primera vez reconoció la afectación de los glaciares en la alta cordillera lo que -dijo- es grave para los ecosistemas de la zona.
Asimismo, estima que los empleos que producirá la operación minera en la zona serán de corto plazo y se reducirán una vez finalizada la construcción.