(La Tercera) Como una enorme puerta de entrada. Así calificó la Presidenta Michelle Bachelet a Chile ante la delegación de ejecutivos y autoridades japonesas que en julio del año pasado visitaron el país, y fue la señal que le dio la Mandataria al primer ministro del país nipón, Shinzo Abe, para fortalecer las relaciones comerciales entre ambas naciones. “Quiero mostrarles que Chile es un gran socio y una enorme puerta de entrada a la región latinoamericana”, dijo Bachelet en la oportunidad.
El mensaje no es menor, dado que Japón será responsable del 10% de la futura inversión que se espera concrete el sector minero en la próxima década, programa que en total supera los US$ 100 mil millones. De hecho, si se materializa esa cartera de proyectos, Japón se convertirá en el tercer país inversor, explica la ministra de Minería, Aurora Williams.
Por eso no llamó la atención que en el marco de esa visita oficial -que permitió la presencia de Abe en la inauguración de la mina Caserones- se firmaran siete memorandos de entendimiento entre el gobierno chileno y ese país: con Codelco y con Cochilco.
El brazo ejecutor de estos acuerdos será Jogmec, organismo estatal nipón que vela por que al país asiático nunca le falten recursos naturales, entre estos, los minerales. “Jogmec es un interlocutor muy relevante para nosotros, porque representa experiencia y, además, porque tiene la mirada de lo que se tiene que lograr en el negocio minero”, explica Williams.
Financista
Los lazos con la entidad -vista en Chile como la símil de Corfo, pero para grandes empresas- son antiguos. Tiene oficinas en Chile desde 2004, pero en 1968 ya realizaba exploraciones mineras en este lado del mundo, a través de Minería Metálica, Agencia de Japón (MMAJ), organismo que dio paso a lo que hoy se conoce como Jogmec.
Así lo cuenta el gerente general del organismo, Kunihito Yamamoto, quien explica que dentro de las labores que cumplen está financiar la exploración y desarrollo de las compañías japonesas.
Este organismo ha sido el impulsor de la llegada al país de empresas como Marubeni, Mitsui, Pan Pacific y de la reciente Sumitomo Metal Mining, socia de la polaca KGHM Polska Miedz en Sierra Gorda. En conjunto, Jogmec ha invertido con ellas US$ 850 millones, tanto para apoyar en exploraciones como financista a través de la garantía de responsabilidad civil para el desarrollo.
En Chile descubrieron Los Helados, depósito de cobre ubicado a 10 kilómetros de Caserones, en la III Región, y que fue nominado para el premio Exploración del año, en 2012, galardón que otorga la revista Mining Journal. Hoy el proyecto está en manos de NGEx (60%) y Pan Pacific Copper (40%).
Además, en la década de los 90, Jogmec descubrió el yacimiento Atacama Kozac, ubicado también en la III Región, en el distrito Punta de Cobre. Hoy el yacimiento es operado por la japonesa Nittetsu Mining Co. (dueña del 60%) y el grupo Errázuriz (propietario del 40%).
Nuevos negocios
Jogmec, explica Yamamoto, ha trabajado antes con Cochilco, Codelco, Enami y Sernageomin en un esquema de cooperación técnica, y también ha colaborado con Cochilco en reuniones con empresas japonesas, con el fin de incentivar su llegada al país. “Chile es un país geológicamente prolífico y aún tiene potencial para nuevos descubrimientos”, explica el ejecutivo.
Y es en exploraciones donde Jogmec está trabajando con Codelco. En julio firmaron una carta de intenciones y hoy se está evaluando realizar un potencial joint venture de exploración. “Eventualmente, Jogmec podría participar con un socio financista. En esta línea, se han estado discutiendo estructuras de negocios que beneficien a ambas partes”, explican en Codelco. Agregan que si llegan a algún acuerdo, “lo más probable es que a futuro, y luego de avanzar en la primera fase, Jogmec quiera una opción para traspasar eljoint venture a alguna compañía japonesa de prestigio”.
En el organismo japonés explican que también quieren aprovechar de trabajar con la minera estatal la aplicación de las nuevas tecnologías que están desarrollando las compañías niponas. Se trata de “retos tecnológicos” usados para el desarrollo de los recursos naturales. “Hay muchas empresas japonesas que tienen una tecnología avanzada, pero tienen un conocimiento limitado de la minería. Al cotejar dichas tecnologías con las necesidades de Codelco, esperamos que se puedan encontrar nuevas rutas de trabajo. Sería un beneficio mutuo”, explica.
Minería del futuro
Con Cochilco también se está trabajando. Hace algunas semanas, el vicepresidente de la entidad, Sergio Hernández, viajó a Japón y en su agenda figuraba una reunión con la entidad estatal. “Con Jogmec llevamos 10 versiones de un diálogo donde, a través del vínculo directo entre ambas agencias y de empresas invitadas, podemos ponernos al día sobre objetivos y desafíos estratégicos de ambos países en el ámbito de los recursos minerales”, explica Hernández.
Agrega que entre los temas que se discutieron en su visita estuvieron los retos de Chile y la minería del siglo XXI, tendencia de los nuevos usos del cobre, aleaciones y áreas de crecimiento, y el negocio del reciclaje y medioambiente.
Pero no sólo esos temas preocupan a Jogmec. En la visita que en junio del año pasado hizo la ministra Williams a Japón, la entidad manifestó su preocupación por los cambios que en ese momento estaba promoviendo el gobierno de Bachelet, sobre todo la derogación del DL600 y la reforma tributaria. “Lo que les preocupaba era el estado de sus contratos, y una de las cosas que a ellos les satisfizo de manera importante fue explicarles que en aquellos proyectos que tenían contratos con el DL600, no se iba a aplicar ningún tipo de retroactividad, por lo que se mantendrán las condiciones contractuales definidas”, explica Williams.
Otro punto que los dejó tranquilos fue el tiempo que se tomará el Estado para tener un instrumento de reemplazo, modelo que hoy se encuentra en análisis. “Eso les parece adecuado, porque no son cambios bruscos que puedan afectar los proyectos que puedan tener en evaluación”, dice.
La preocupación no es menor, porque desde 1974 hasta el 2012, Japón ha materializado inversiones por casi US$ 7.000 millones, lo que representa el 8% de las inversiones realizadas a través del DL600, explica la secretaria de Estado.