(El Mercurio de Calama) Las cuatro divisiones de Codelco y Minera El Abra, junto con SQM Salar y Albemarle, vivieron semanas complejas durante los primeros meses de pandemia, pues luego que el 14 de marzo se confirmaran los dos primeros casos de Covid-19 en Calama y la Región de Antofagasta, no tardó mucho en que la enfermedad llegara hasta las distintas operaciones.
Entre las múltiples medidas que aplicaron las empresas destacaron la paralización parcial de los proyectos, como fue el caso de la mina Chuquicamata Subterránea y de El Abra que apostó por las semanas cambiadas, produciendo en una y realizando mantenciones en sus plantas, en la otra.
Menos trabajadores
Por su parte, las medidas para reducir la dotación y bajar la densidad de trabajadores, como el teletrabajo, la desmovilización de las personas por edad o condición de salud (grupos de mayor riesgo) y los cambios de turno (7×7, 12×12 e incluso 14×14); significó que 2 mil personas dejaran de asistir a faena sólo en Chuquicamata.
Adicionalmente, las empresas han realizado miles de exámenes PCR, test rápidos y de antígeno.
En el caso del Distrito Norte, suman más de 60 mil pruebas, las que se complementan con encuestas que debe completar cada persona antes de ingresar a su operación.
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