Hace 20 años, Mauro Mezzano, Juan Cariamo y Andrés Medina junto a otros socios fundaron la consultora chilena Vantaz, firma que en la última década dio un giro enfocándose 100% en la asesoría a la industria minera, que los llevó a abrir oficinas en Australia y Perú.
En la actualidad, con siete socios, 170 colaboradores y dos firmas asociadas (Bluefield y Parnés), Vantaz prepara un nuevo salto que busca acompañar a las grandes compañías mineras en todo el proceso de transformación que está viviendo el sector a nivel mundial.
Por eso, crearon una nueva división de estudios, equipo que será liderado por Daniela Desormeaux, economista de la Pontificia Universidad Católica de Chile y fundadora de la consultora signumBOX, donde dejará su cargo como gerenta general.
La nueva encargada de estudios de Vantaz es también directora de Cesco, participó en la Comisión Presidencial para el Litio en 2014, y fue destacada en 2016 en el premio 100 Mujeres Líderes de Mujeres Empresarias y El Mercurio.
Avanzar en internacionalización
“Para que el ecosistema minero pueda tomar mejores decisiones en estos tiempos complejos creemos que es importante visibilizar información de valor y la experiencia de Daniela será clave para cumplir ese objetivo. Además, nos permitirá fortalecer nuestra oferta de estudios a clientes y dar un soporte interno a los distintos proyectos que estamos ejecutando”, comenta Juan Cariamo, co-CEO de la consultora, quien además es presidente del Centro Nacional de Pilotaje de Tecnologías para la Minería.
Por su parte, Mauro Mezzano, Co-CEO de la consultora, agrega que los desafíos futuros de la minería están centrados en mejorar la productividad, la transformación tecnológica y la sustentabilidad.
En esa línea, reforzarán su alianza con Bluefield para ampliar sus operaciones en Australia (donde están hace diez años) y ofrecer los servicios de ingeniería y consultoría de mantenimiento (camiones, palas y otros activos mayores) a los proyectos mineros en dicho mercado.
Adicionalmente, agrega, trabajan en un nuevo plan de internacionalización que incluye abrir oficinas en Estados Unidos, Canadá y, potencialmente, Sudáfrica, en línea con las positivas perspectivas de la industria minera en el mediano y largo plazo, más allá de la coyuntura que está viviendo el mundo por la pandemia del coronavirus.
“Cuando pase la crisis, el mundo tiene aún mucho espacio por crecer, especialmente China e India, y eso favorece a las materias primas, como el cobre. A eso hay que sumar el auge de la electromovilidad, que incrementará la demanda por el metal rojo en los países desarrollados. Y a diferencia de las últimas décadas, hoy la minería tiene que estar preocupada de ser sustentable con el medio ambiente y con las comunidades. Además, vemos que el sector se encuentra retrasado en el uso de nuevas tecnologías y ahí se abren oportunidades para acompañar a nuestros clientes”, comenta Mauro Mezzano, quien también es mentor de Endeavor y ha liderado la Gira Experiencia Australia, para que emprendedores mineros locales puedan hacer negocios en el mercado oceánico.