El ministro de Minería, Baldo Prokurica, en conjunto con el presidente ejecutivo de Codelco, Octavio Araneda, visitaron las instalaciones de El Teniente, ubicada en la Región de O’Higgins, con el fin de monitorear las medias sanitarias para el retorno gradual de los trabajadores de los proyectos de expansión de la división.
En la oportunidad, el secretario de Estado sostuvo que “aquí se han tomado una serie de medidas para los momentos en donde haya aglomeraciones, no existan contagios”.
La autoridad añadió que “se ha instalado el primer centro de testeo del mundo al interior de una mina, pero además de eso, se han adoptado varias acciones que significan que, solo en esta división, se han hecho más de 18.000 exámenes PCR, antígeno y tests rápidos para los efectos de que los trabajadores puedan tener la seguridad que en su lugar de trabajo no se van a contagiar”.
Entre las medidas, la división redujo de 17.000 a 4.000 personas trabajando en la operación y suspendió, el 4 de julio, los proyectos Andes Norte, Diamante y Andesita, que constituyen la extensión por 50 años más de la vida útil de la mina.
Test en terreno
Octavio Araneda, presidente Ejecutivo de Codelco, destacó que “estas fiscalizaciones en terreno son muy importantes para ir viendo en qué elementos mejorar y también para dar tranquilidad, porque en minería las cosas las estamos haciendo bien (…) estamos muy contentos porque el número de contagios ha disminuido considerablemente, y estamos más motivados que nunca a seguir mejorando y reforzando para prepararnos ante un eventual rebrote”.
Además, enfatizó que la estrategia de la cuprífera estatal se centra, en primera instancia, en la detección de casos con un procedimiento que incluye entre 2.000 a 3.000 tests a la semana, tan solo en El Teniente, con el propósito de identificar oportunamente los posibles contagios. En segundo lugar, la administración focalizó esfuerzos, recursos y la mejor metodología en la trazabilidad. Y por último, en el aislamiento del caso activo.
En la visita, las autoridades destacaron el bajo índice de contagios en la industria -el 2% del total de trabajadores– debido a la cultura de seguridad de las personas que ejercen en el sector.