(El Mercurio) El ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, señaló que debe existir conciencia de que el Estado falla, pero subrayó que «el Estado es imprescindible para poder vivir en una sociedad en que el crecimiento lo lleva el mercado».
El secretario de Estado participó en el seminario «La sociedad que nos merecemos», organizado por Oldgeorgians, que agrupa a los ex alumnos del colegio Saint George, en el que también intervinieron como invitados el presidente de la Sofofa, Bernardo Larraín; la economista de LyD y ex alumna Susana Jiménez, y la ex ministra de Educación Mariana Aylwin, quien fue profesora de Historia del plantel educativo.
En su presentación, el presidente de la Sofofa planteó la necesidad de que el Estado simplifique el sistema regulatorio en general y se instale en el Ejecutivo una unidad con un esquema ordenado. «Debe haber en Chile una Agencia de Evaluación de Impacto Regulatorio, independiente del gobierno de turno», enfatizó.
Puso como ejemplo el rechazo al proyecto minero Dominga, aunque señaló que no es solo el caso puntual en este gobierno, sino que es transversal. «En el caso Dominga se constató que al final el sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (EIA), sobre todo en su etapa final, está completamente politizado, en circunstancias de que se requiere reactivar un ciclo de inversión en Chile».
Por su parte, la intervención del ministro Valdés se centró en el rol del Estado en la economía, partiendo de la base de que el socialismo real terminó hace décadas y que el modelo se acota al mercado y un Estado que convive con ese mercado.
En este esquema, lo que se pide a la empresa es que gane plata, sea eficiente y siga las reglas que el Estado establece, explicó. El mercado presenta fallas y una de ellas está en la distribución del ingreso donde se requiere que el Estado intervenga ante las fallas de eficiencia, la provisión de bienes públicos y las reglas.
Acerca de las fallas institucionales a las que aludió el presidente de la Sofofa y sin hacer mención del caso Dominga, señaló que si una institución no está funcionando bien, lo que hay que hacer es mejorar esa institucionalidad.
El titular de Hacienda planteó que Chile no está mal en eficiencia del mercado, pero tiene un problema complejo y es que tenemos pocos actores: cuatro farmacias, seis AFP y tres bancos grandes. Allí hay un tema de competencia que se complica por nuestro tamaño, comentó.
El ministro Valdés manifestó que a diferencia de países desarrollados donde hay una serie de servicios públicos que provee el Estado y los privados lo usan (misma educación para el hijo del gerente de una empresa que para el hijo de un empleado, en el caso de Suecia), en Chile se ha construido una sociedad dual, con algunos servicios públicos pagados privadamente como la educación y la salud. «Educación con copago es lo máximo de segregación y no es sostenible en el tiempo», indicó.