Los desafíos técnicos y nuevos desarrollos que se presentan en materia de desalación y bombeo fue una de las temáticas que acaparó el interés de los asistentes al seminario “Agua de mar para la minería”, realizado en el marco de la Feria Expomin 2016.
Es así como en el encuentro, Bartolomé Marín, jefe del Departamento de Proyectos Especiales y Desalación de la empresa Aqualia Infraestructura, expuso sobre los diversos factores técnicos que repercuten en la operación y mantenimiento de las plantas desaladoras.
l profesional resaltó que la operación y mantenimiento puede alcanzar los US$0,11 por metro cúbico, siendo el costo energético el 34% de la proporción total. En ese contexto, resaltó que los costos de operación y mantenimiento son menores en comparación a los vinculados al insumo eléctricos y los de capital.
Vinculado a lo anterior, el ejecutivo de Aqualia Infraestructura afirmó que el agua desalada puede parecer cara, pero es más costoso no disponer del recurso hídrico para satisfacer los requerimientos de la comunidad y las diversas actividades económicas.
Por su parte, Carlos Vergara, Director South & Central America de Newterra, se refirió a las diversas tecnologías para reutilizar el recurso hídrico, destacando por ejemplo el reuso de las aguas negras, por medio de biomembranas, para ser utilizada en diversas actividades industriales.
El ejecutivo resaltó la importancia de contar con soluciones modulares, que se adapten a los requerimientos del cliente, haciendo hincapié en que se dispone de la tecnología para llegar a la calidad de agua que requiere el cliente, y es necesario ir a terreno para verificar las condiciones de la operación y las opciones de desarrollo posibles.
Eficiencia y energía
Otro de los expositores del encuentro fue Luis Navarro, gerente de Procesos de Brass Chile, quien se refirió a los tópicos que impactan en el diseño, operación y disponibilidad de los sistemas de impulsión, resaltando por ejemplo la importancia de definir con claridad el flujo de diseño que requiere la operación, lo cual condicionará por ejemplo el nivel de eficiencia necesario en materia de bombas.
El ejecutivo explicó que otro factor es si se busca que el sistema de impulsión sea abierto o cerrado, lo que impacta en el nivel de volumen de regulación disponible en los tanques. Esta elección también incide en la pérdida de carga que presentará el sistema.
El método de operación de las bombas tiene además un impacto en el nivel de eficiencia energética que será posible alcanzar, señaló.
En esa misma línea, Ignacio Goic, ingeniero senior de Aplicaciones Mineras de General Electric, abordó los criterios técnicos que definen la elección de la bomba en los sistemas de impulsión y expuso la solución ideada para mejorar la eficiencia energética de un sistema de impulsión en una operación minera del norte de Chile.
El componente químico
En el seminario, David Inacio, gerente de Desarrollo de Negocios Eumea de la empresa Basf, expuso sobre los elementos químicos que confluyen en la operación de las plantas desaladoras.
El ejecutivo resaltó que la compañía se enfoca en el desarrollo de componentes químicos que permitan una mayor eficiencia en el proceso de tratamiento, entregar una mayor protección de las membranas y extender la vida útil de la instalación.