(La Tercera) La semana pasada fue el empresariado el que apuntó sus dardos contra el proyecto de reforma laboral, a través de un video lanzado en un evento de Sofofa y divulgado a través de las redes sociales. Ayer, fue el turno de los trabajadores del cobre y de puertos, quienes paralizaron sus funciones con el objetivo de “presionar” por modificaciones a la iniciativa, que actualmente se discute en la Comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados.
La presidenta de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), Bárbara Figueroa, manifestó, en una entrevista a radio Duna, que existen elementos del proyecto que aún están en debate con el Ejecutivo y el Parlamento.
Dentro de estos, dijo, figura una mejor conceptualización de los servicios mínimos en caso de huelga, cuya redacción sería aún “perfectible”, aseguró.
También afirmó que existen diferencias sobre la reajustabilidad del piso de negociación, ámbito en el que los trabajadores plantean mantener las condiciones pactadas en la anterior negociación y que se reconozca la reajustabilidad del IPC. Según Figueroa, en este tema “es donde tenemos la mayor distancia con el Ejecutivo”.
Además, dijo que pedirán eliminar el debate sobre los pactos de adaptabilidad y la ampliación de materias de negociación, que sería “atemporal”, porque el proyecto busca el fortalecimiento de los sindicatos.
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Movimiento sindical
Los trabajadores portuarios y de la minería del cobre, en tanto, aseguraron ayer que las modificaciones al Código del Trabajo contempladas en el proyecto “no van en la dirección correcta”.
Pedro Riquelme, vocero de la Unión Portuaria de Chile, sostuvo que dentro de los temas en los que se debe avanzar está la criminalización de la huelga. Precisó que si bien se eliminó el desafuero de los dirigentes, aún se mantienen multas. Coincidió con la CUT en la idea de mejorar la conceptualización de los servicios mínimos.
El dirigente sindical explicó que la paralización de ayer tuvo como principal objetivo generar mayor coordinación entre los trabajadores. Subrayó que se trabaja en la elaboración de una propuesta única, que aúne las demandas de todos los gremios.
Manuel Ahumada, presidente de la Confederación de Trabajadores del Cobre (CTC), afirmó que el movimiento sindical “asumirá una posición mucho más activa para avanzar, profundizar y dar cumplimiento a lo comprometido” por el gobierno. Agregó que la paralización de ayer es una señal de “paro productivo”, ya que el gran “acto de masas” a la que tienen que apuntar los trabajadores será el del 1 de mayo.