LyD: Grandes empresas y sus dueños pagarán impuesto máximo de 44,45% tras reforma tributaria

Oct 13, 2014

El aumento de la tasa corporativa a 27% y la restitución del 35% por el crédito al ir al global complementario, son las principales causas de los aumentos promedios ponderados en tributos para las firmas nacionales, según un informe del think tank.

(Pulso) Tras la aprobación de la reforma tributaria impulsada por el gobierno, el investigador de Libertad y Desarrollo, Francisco Klapp, elaboró un conjunto de ejemplos sobre distintos tipos y tamaños de empresas, y los efectos que tendrá la iniciativa sobre ellas y sus dueños.

A través de estos ejercicios se evidencia que la mayoría de las empresas cuyos dueños están en el tramo más alto de los tributos, terminará pagando en promedio ponderado la tasa máxima de impuesto de 44,45% durante la vida de la firma, debido a que presuponiendo que en general se acogerán al sistema parcialmente integrado, el tributo de primera categoría sube de 20% a 27% y a que dicho gravamen ya no constituirá un crédito de 100% contra el global complementario, sino de 65%.

Sólo en el caso de las empresas pequeñas y que adopten el sistema de renta atribuida éstas se verían beneficiadas por el cambio tributario, toda vez que a partir de cuando lo indique la ley podrían acogerse al nuevo régimen del 14 ter.

En el resto de los casos y sin considerar el Valor Presente Neto (VPN), las empresas y sus dueños pagarán en promedio a través de su vida un impuesto bastante mayor al que tenían hasta ahora.

Para la medición, el experto utilizó como supuesto 3 años de vida para una empresa grande con sistema parcialmente integrado y 5 años para las demás (sólo de carácter ilustrativo y que no condiciona los resultados), asumiendo que toda la utilidad se retira a lo largo de la vida de la empresas, lo que hace que los resultados sean comparables con las tablas habituales de la OCDE, pero entregando algo más de información sobre lo que sucede entre períodos por efecto de depreciación o compras de activos.

Empresa Grande parcialmente integrado – sin beneficios Pymes

Este caso corresponde a una empresa grande que no accede a beneficios para Pymes, y que el primer año no gana utilidades para fines de impuestos, pero que sí tuvo flujo de caja.

Cabe destacar que la firma utiliza el sistema parcialmente integrado (SPI), ya que a juicio del investigador se espera que una gran parte o casi todas las empresas grandes usen este mecanismo, con la excepción de algunas empresas constituidas fuera de Chile, a las cuales eventualmente podría convenirles el sistema de renta atribuida.

Asimismo, el dueño ya está en el tramo máximo, tal como lo hace la OCDE en sus comparaciones.

Al retirarse toda la utilidad durante la vida de la empresa, la tasa efectiva del dueño antes de la reforma podía llegar a 40%, mientras que tras ella se elevaría a 44,45%.

Esto pasa fundamentalmente por el cambio en la tasa del impuesto corporativo, que sube de 20% a 27%, y por el hecho de que si bien este pago se mantiene como un crédito al momento de ir al global complementario, después hay que hacerle una restitución al Estado por el 35% de dicho crédito. Esto hace que la tasa efectiva del dueño aumente, aún cuando la tasa marginal máxima se rebajó de 40% a 35%.

Empresa Mediana parcialmente integrado – compra una máquina por 25.000

Esta es una empresa mediana (más de 50.000 UF), que utilizaría el nuevo beneficio de deducir 4.000 UF cada año de su base imponible, por los primeros 3 años, ya que no reparte toda la utilidad.

En este contexto, Klapp destaca que aquí una vez que sí se comienzan a repartir utilidades (dividendos), éstas en parte vendrían sin crédito de primera categoría, ya que 4.000 UF anuales nunca pagaron ese impuesto. Esto es análogo a lo que sucede con las utilidades antiguas del FUT que tienen crédito muy bajo, porque se devengaron cuando el impuesto de primera categoría era menor.

«Lo diferente es que, en un sistema parcialmente integrado, donde existe una restitución del crédito que lleva la tasa efectiva del dueño al 44,45%, el no tener crédito puede de hecho ser beneficioso, pues la tasa efectiva sobre dichas utilidades sería menor», explica. Y precisamente es esto lo que hace que en este ejemplo, tras la reforma, la tasa de impuesto final sea de 44,04% en vez de 44,45%.

Empresa Chica parcialmente integrado – compra una máquina por 25.000

AL considerar los ejemplos para las empresas más pequeñas, el investigador de LyD supone la compra de una máquina por 25 mil UF, la que antes de la reforma podía depreciarse en forma gradual a partir del primer período y con ello distribuir la rebaja de impuesto a lo largo de la vida de la empresa. Ahora, con la reforma aprobada, la máquina se podrá depreciar en un sólo período y de inmediato, porque tiene depreciación instantánea.

En este caso, la reforma lo que hace es igualar la utilidad financiera a la Renta Líquida Imponible (RLI), que es como sería si a las empresas las dejaran llevar la contabilidad como la llevaría el dueño, que prefiere depreciar de inmediato por el valor tiempo del dinero.

De esta forma, en el segundo período la máquina ya fue pagada, con lo que tiene utilidades por 25 mil UF, al igual que en el tercer período. Mientras, en el 4 año si bien es similar a los anteriores, se decidió entregar dividendos por 36.500 UF y por lo tanto el dueño tiene que pagar su impuesto personal, pero tiene crédito que puede usar. Viene la restitución, que es un 35% de ese crédito, y por lo tanto el impuesto total es de 15.475 UF, equivalente a un 31% del dividendo y a un 62% de lo que ganó la empresa ese año. Lo mismo para el último período. El impuesto final sería 44,45%. Naturalmente, si la tasa de descuento del inversionista es más alta, el beneficio de la depreciación instantánea aumenta.

Empresa Chica renta atribuida – compra una máquina por 25.000

Esta es una empresa pequeña que hoy es demasiado grande para acogerse al régimen 14 ter, pero que tras la aprobación de la reforma podrá hacerlo considerando su nueva norma. La firma opta por el sistema de renta atribuida, que es el defecto para este tipo de firmas.

Lo interesante es que dado que el dueño retira toda la utilidad y ya se encontraba en el tramo máximo, la renta atribuida reduce su carga de 40% a 35%.

«Este es un caso bien especial, pues para dueños de tasas personales más bajas y que además no retiran el 100% de la utilidad, las conclusiones serían muy distintas» advierte Francisco Klapp. Esta firma a partir del primer año usa su depreciación instantánea y «eso es interesante porque no se le atribuye al dueño. Es bien importante porque en el sistema anterior, si se usaba la depreciación acelerada y se retiraba todo, se debía devolver el beneficio», explica.

A partir del segundo año el impuesto queda parejo en 35%, independiente de cuándo se paguen los dividendos, puesto que la totalidad del impuesto se cancela año a año en el sistema atribuido.

Insiste en que este caso «ejemplifica al grupo reducido de empresas que podría salir beneficiado con la reforma». Otro caso eventual son compañías que tengan mucha participación de AFP, pues no se le atribuye a los dueños y no se hace uso de los créditos.

Lo último
Te recomendamos

REVISTA DIGITAL

Temas relacionados

Suscríbase al Newsletter Minería Chilena