(La Tercera) Cuando el ex presidente del Banco Central José de Gregorio dijo ayer que el tercer trimestre puede ser tan débil como el segundo para la economía chilena, y que de ser así “el PIB estará en torno a 2% y eso puede ser menos de 2%”, no era una voz en el desierto.
Los economistas de JP Morgan bajaron su proyección de crecimiento para 2014 a 1,9% a comienzos de agosto. Ayer, Marcos Buscaglia, economista jefe para América Latina de Bank of America Merrill Lynch, recortó su estimación a 1,9% para este año y a 2,7% en 2015.
el Imacec de 0,8% de junio tira toda la serie hacia abajo”, comentó.
A su juicio, el freno en la inversión, ligada al fin del ciclo global de inversión en minería y a la moderación de la inversión en oficinas, sumada a la incertidumbre por el conjunto de reformas que impulsa el gobierno, son los dos grandes factores que explican la menor actividad. La aceleración “suave, pero aceleración al fin”, precisó, se explicaría por un mayor crecimiento externo y una depreciación del tipo de cambio que permitirá una expansión del sector transable de la economía en Chile, de una política monetaria más expansiva y de un gasto público que va a seguir siendo un factor de expansión en lo que queda del año.
Buscaglia advierte que las tasas altas de crecimiento serán más esquivas en el futuro. “En los últimos años Chile tuvo un crecimiento promedio de 4,6%, algo por debajo de 5%, en un contexto de alto ciclo de precio de commodities, boom de inversión minera, y una liquidez global muy amplia. De cara al futuro con algunos de estos factores no tan expansivos, uno esperaría que el crecimiento caiga respecto del promedio de los últimos años. Sin reformas importantes que permitan un aumento de la productividad en Chile, pensamos que en 2015 y los próximos tres años el crecimiento debería caer a cerca de 3%”, señaló Buscaglia. “No es una catástrofe, no es demasiado negativo, pero sí me parece que hay que estar acostumbrado a que la tasa de crecimiento va a ser más baja”, agregó.
Sesgo a la baja
BTG Pactual también recortó su proyección para 2014: de 3,4%-3,6% a 2%, y dejó abierta la posibilidad de que sea menos. “Dada la desaceleración en las cifras de consumo privado y la inversión aún magra, vemos menos posibilidad de un repunte significativo en la economía durante el segundo semestre de este año. Más aún, indicadores recientes sugieren que el crecimiento en el tercer trimestre podría ser incluso más bajo que en el segundo”, señaló un informe reciente del banco.
Otro que acaba de ajustar la proyección es Credicorp, de 2,5% a 2,2%. Pero Paulina Yazigi, gerenta de Research Renta Fija y Economía de la firma, comentó que “el riesgo es a la baja y no al alza. Quizás, al alza podría ayudar la base de comparación, y/o que la balanza comercial tire más el carro que lo que proyectamos, con un crecimiento de las exportaciones y una caída de las importaciones”.
En opinión de la economista, “el riesgo es que la inversión crezca menos de lo proyectado, y que el consumo tenga una desaceleración mayor (…) hasta aquí hemos visto una caída en inversión minera, pero podríamos ver una caída en inversión en el sector construcción e inmobiliario, y en infraestructura”.
El decano de la Facultad de Economía de la U. de Chile, Manuel Agosin, dijo que las cifras aún son positivas, pero todas van a la baja.