(El Mercurio) Cerca de US$8.000 millones de yacimientos conocidos de carbón se encuentran bajo la superficie de la tierra. Pero, las firmas que planean extraerlo y usarlo son blanco de un grupo de inversores preocupados por los gases de efecto invernadero que se generarán y están liderando una campaña para presionar a todas las industrias de combustibles fósiles por el cambio climático.
Por ejemplo, publica Bloomberg, Storebrand ASA -que administra US$ 74.000 millones de activos de Noruega- se deshizo de todos los títulos de 24 empresas de carbón y arenas bituminosas, entre las que está Peabody Energy Corp., mayor productor de carbón de EE.UU. La combustión del carbón genera el doble de gases de invernadero que el gas natural.