Los 23 días de duración de la huelga de los más de 2 mil trabajadores de Escondida han hecho que la compañía comience a conversar con sus clientes para negociar los posibles atrasos en las entregas de concentrados de cobre pactadas con ellos.
Así lo aseguró ayer el vocero de BHP Billiton en Chile -controlador de Escondida-, Mauro Valdés, quien destacó que el calendario de entregas de mineral será modificado según las conversaciones que tengan con sus clientes.
Según un artículo publicado por el periódico británico Financial Times, existirían en la industria sospechas de que la compañía está tomando ventaja de sus menores entregas de concentrados de cobre, usándolas como ficha de negociación en sus renegociaciones con las fundiciones japonesas.
Ayer los trabajadores de la empresa instaron a la firma a renovar el diálogo, el que se rompió definitivamente el 20 de agosto luego que la asamblea de trabajadores rechazara la última propuesta de la empresa.
«Lo que quiero es que el Gobierno logre convencer a la mesa negociadora de la firma para que se vuelva a reunir con nosotros», señaló el presidente del sindicato de la minera, Luis Troncoso, quien adelantó que de no lograr resultados con los representantes de la Dirección del Trabajo, él mismo intentará contactarse con la compañía.
Si bien el dirigente recalca que sí existen conversaciones informales, la empresa lo niega y asegura que no retomará el diálogo en el corto plazo.
«Sólo retomaremos las conversaciones cuando veamos de parte de los dirigentes una real voluntad de conversar para llegar a acuerdos. Adicionalmente queremos un compromiso de ellos de que lograrán en la asamblea la aprobación de los acuerdos a los que se llegó en la mesa de negociación», dice Valdés.
La compañía está en proceso de preparación para trasladar a las faenas a más reemplazos y continuar así con su plan de normalización de la producción.
Fuente / El Mercurio