Dicen que no existe productividad sin seguridad… Si bien no está clara la causalidad entre una y otra, sí está claro que cualquier empresa con buenos indicadores de seguridad es una empresa productiva.
Y si la seguridad y sus requerimientos suelen ser vistas como un procedimiento más de una serie de exigencias diarias a cumplir en las compañías, ¿dónde está la relación con la productividad?
Justamente en entender para qué sirven estos procedimientos burocráticos y el contexto en el cual deberían implementarse, no viéndolos como una formalidad más en una serie de tareas exigidas que sólo contribuyen a enlentecer los procesos.
Se ha estudiado que las empresas productivas, en la medida que se han ido dando cuenta de la importancia que tienen sus trabajadores en el negocio, han comenzado a usar los rigurosos procedimientos que la seguridad exige como formas de retroalimentación ordenada y metódica. Esto es, información precisa y oportuna para tomar las acciones correctivas necesarias para evitar las ineficiencias del sistema.
Y esto es un círculo virtuoso: las empresas se preocupan por la seguridad de sus trabajadores, mientras estos últimos se sienten seguros y protegidos en su ambiente de trabajo. Ello contribuye al bienestar de los trabajadores y sus familias, mejorando su productividad y, finalmente, transformándose en mutuo beneficio tanto para ellos como para las empresas.
Pero esta relación no ha sido fácil de entender y, menos aún, de implementar. La rigurosidad que exigen los procedimientos de seguridad tiende a transformarlos en rutinarios, si no existe un liderazgo con visión de largo plazo en torno a una cultura de seguridad, que fomente el autocuidado desde la más alta jerarquía de una compañía. Este liderazgo visionario es el que moviliza, motiva y empodera a personas para actuar en pos de su visión, creando compromiso, espacio y oportunidades de acción.
Adicionalmente, la implementación de dichos sistemas de seguridad rigurosos tiene otros beneficios como una mejor reputación de la empresa o menores costos de accidentes y sus seguros asociados. Diferentes estudios también señalan que la implementación de estos procesos tiende a sistematizar el trabajo, generando eficiencias de parte de los trabajadores que llevan a disminuir la supervisión. Procedimientos de mantención efectiva de equipos llevan a menor cantidad de interrupciones operativas y menores gastos de mantenimiento. Todos estos factores tienen un positivo impacto en costos.
En resumen, la preocupación por la seguridad genera círculos virtuosos en torno a la productividad, en tanto existen dentro de un liderazgo visionario que fomente una cultura de seguridad. La rigurosidad de sus procedimientos tiene positivos efectos en la sistematización de tareas y en la eficiencia del sistema en general, en la medida que la información que se genera permita corregir rumbos.