(Economía y Negocios online) La situación económica en América Latina y el Caribe está lejos de mejorar. Si se anticipaba que la región crecería 1,8% el año pasado, el último informe del Banco Mundial constata que la cifra solo alcanzó a 0,7%. Y si de proyecciones se trata, para este 2019 la entidad pronostica un modesto 0,9%.
Las razones que explican el débil desempeño durante 2018 son la contracción de 2,5% en Argentina, la lenta recuperación de Brasil -luego de la recesión de 2015 y 2016-, el crecimiento anémico de México debido a la incertidumbre política y el colapso de la economía venezolana.
«Lamentablemente, las perspectivas de crecimiento para este año no muestran una mejora sustancial con respecto a 2018. Esto es consecuencia del crecimiento débil o negativo en las tres economías más grandes de la región -Brasil, México y Argentina- y del colapso total en Venezuela, donde se espera que el PIB se contraiga 25%», cita el documento.
El organismo internacional dio a conocer ayer su reporte semestral «¿Cómo afecta el ciclo económico a los indicadores sociales en América Latina y el Caribe? Cuando los sueños enfrentan la realidad».
Fue el economista jefe para América Latina y el Caribe, Carlos Végh, quien entregó -a través de una conferencia telefónica desde Washington- los detalles de la publicación, que incluye las perspectivas económicas para la región y un análisis sobre la manera en que los indicadores de pobreza están sujetos a los vaivenes de la economía.
«Un entorno externo complicado agregará vientos en contra adicionales. Esto incluye una caída en los precios de las materias primas registrada a fines de 2018, un crecimiento más lento de los principales socios comerciales de China y tasas de interés internacionales más altas», detalló el experto a la prensa internacional.
Redes de protección social
En el caso de Chile, el Banco Mundial proyecta un crecimiento del PIB de 3,5% para este 2019 y un modesto 3,1% para el próximo año. Países que tendrán un mejor desempeño en la región, durante 2019, son Bolivia (4%) y Perú (3,8%), en tanto que Colombia llegará a 3,3%, pisándole los talones a Chile.
Después de Venezuela, la mayor debacle económica que ha registrado la región, Argentina es la nación que experimentará el peor resultado, con una caída de 1,3% este año. Sin embargo, el Banco Mundial estima que en 2020 logrará un alza de 2,9%.
Entre los mayores desafíos que enfrenta la región, el Banco Mundial destaca la necesidad de que los responsables de políticas públicas desarrollen redes de protección social para apoyar a la población más pobre y vulnerable durante los ciclos de desaceleración económica.
«Políticas redistributivas, como las transferencias monetarias condicionadas, están actualmente muy extendidas en toda la región y contribuyeron a cerca del 35% de la disminución de la pobreza durante el auge de las materias primas a principios del siglo», advierte el estudio y sentencia que, «sin embargo, muchos países carecen de programas sociales como el seguro de desempleo, que actúan como amortiguadores durante los ciclos de aumento de la pobreza».