Como parte de las iniciativas de cooperación entre Suecia y Chile, se realizó la conferencia “Swedish Mining Initiative 2017”, organizada por Business Sweden y la Embajada de Suecia en Chile, con el fin de fortalecer los vínculos entre los sectores mineros de ambos países, desde la perspectiva pública, privada y académica.
Las actividades del encuentro, cuya sede fue el Santiago Business & Conference Center, se organizaron a partir de talleres sobre temas como gestión de activos, automatización, mantenimiento, cultura de innovación y equidad laboral. En ellos, expusieron representantes de compañías suecas presentes en el sector minero nacional.
Un foco destacado de la conferencia fue el análisis e intercambio de experiencias sobre las áreas específicas que sostienen el incremento de la productividad en la industria.
Luis Felipe Ross, socio de Matrix Consulting, expuso sobre las “palancas de productividad” identificadas a partir de análisis comparado y visitas técnicas a empresas mineras suecas y chilenas. Al respecto, destacó como factor clave las características de los sistemas de gestión y operación presentes en las compañías.
“En Chile existe un alto número de protocolos y procedimientos, estándares de servicios innecesariamente altos, deficiencia en los niveles de supervisión, en la planificación y en la gestión de mantenimiento”, recalcó el especialista. Como muestra de lo anterior, explicó que mientras las empresas mineras suecas cuentan con dos a tres grados jerárquicos o capas, en el caso de Chile se comprueba la existencia de estructuras de hasta siete niveles.
Avance coordinado y sistemático
El Programa de Innovación Estratégica para la Industria Minera y Metalúrgica Sueca (SIP STRIM), impulsa iniciativas público-privadas que han permitido avances concretos en productividad a partir de ejes estratégicos, como la simplificación organizacional y jerárquica en las compañías del sector.
Jenny Greberg, gerenta de Tecnología e Innovación de SIP STRIM, explicó que los cambios jerárquicos y organizacionales son progresivos y no se logran en el corto plazo, especialmente considerando las características de la actividad minera.
“Por distintas razones, Suecia cuenta con una cultura de apertura a la innovación que no se limita al ámbito tecnológico o de negocios. En nuestra experiencia, el fortalecimiento de la productividad ha avanzado, fundamentalmente gracias al trabajo coordinado y efectivo de todo el ecosistema asociado a la minería”, comentó la ejecutiva.