(El Mercurio) Yerko Galleguillos, alcalde de La Higuera, estaba en plena reunión con los profesionales de la Dirección de Obras Hidráulicas y del Gobierno Regional de Coquimbo para ejecutar un proyecto por $5 mil millones de alcantarillado básico en la comuna, cuando una treintena de manifestantes irrumpieron en el municipio. Cerraron los accesos con cadenas y candados, y comenzaron a gritar a favor del proyecto minero-portuario Dominga.
A esa hora ya se conocía el rechazo del Comité de Ministros al desarrollo de la iniciativa de Iron Andes, la que había apelado a la adversa votación de la Comisión de Evaluación Ambiental de Coquimbo, en marzo de este año.
La acción de fuerza solo se resolvió cuando el alcalde conversó con manifestantes, ya que los carabineros habían iniciado el desalojo de la municipalidad.
«La gente está desesperada, porque quiere trabajo y desarrollo. Es comprensible su molestia, porque este proyecto se ha basado más en lo político que en lo técnico, y ha quedado claro con la votación», dijo Galleguillos, quien acusó el aumento de la presión social a través de fogatas y cortes de carreteras.
«Los ministros son personas instaladas por la Presidenta; por lo tanto, obedecen a un orden. No comparto la decisión del Comité de Ministros, porque fue una decisión política», agregó.
Tensa espera
La jornada se inició a las 7:00 horas, cuando unos 40 miembros de la Mesa Comunal -instancia que tiene 1.600 firmas que apoyan el proyecto Dominga- se reunieron en la oficina de Andes Iron para seguir los pormenores de la votación en Santiago.
Concretado el rechazo, llegaron a la plaza y comenzaron a manifestarse. Además, gritaron contra vehículos con el logo del Gobierno que pasaban por allí.
Sergio Álvarez, del sector de Punta Colorada (norte de la comuna), manifestó que «el Gobierno nuevamente no nos escuchó» y que el «descontento no es solamente en la comuna, sino también a nivel regional».
Pasado el mediodía, el intendente de la IV Región, Claudio Ibáñez, sostuvo que la resolución del Comité de Ministros fue importante, pues «corrobora la decisión que adoptamos como región. Ellos (ministros) han planteado en el voto que Dominga presenta deficiente información de línea base e insuficiencia en sus medidas de mitigación, compensación y reparación, porque además no se hacen cargo de eventuales impactos significativos en el medio ambiente».
En este sentido, destacó que el emplazamiento del puerto está en un área sensible. «Es la reserva mundial del pingüino de Humboldt, donde hay tránsito de cetáceos, ballenas y delfines. Queremos desarrollo, pero desarrollo sustentable».
El rechazo a Dominga se produce a pocas semanas de que se inicie el IV Congreso Internacional de Áreas Marinas Protegidas en La Serena.
En tanto, la organización de conservación marina Oceana celebró el rechazo. «Los argumentos técnicos, la falta de línea de base, la no consideración de la ciencia existente en el estudio de impacto ambiental, finalmente, primaron en este rechazo», señaló Liesbeth van der Meer, directora ejecutiva de Oceana Chile.