(El Mercurio) Minera Escondida, principal faena de cobre del mundo, retomó las conversaciones con el sindicato N° 1 de trajadores, luego que la agrupación estuviera en huelga por 44 días a comienzos de año, constituyendo el paro más extenso en la gran minería privada del cobre chilena. A fines de marzo los trabajadores de la mina operada por BHP se acogieron al antiguo artículo 369 del Código del Trabajo, dando por terminada la movilización al forzar la extensión del contrato colectivo por 18 meses, aunque sin derecho a reajuste ni bono. Pero ahora la administración y el sindicato comenzaron a estudiar un posible acuerdo para extender la jornada excepcional, negociación que sí podría incluir un pago, previo al nuevo proceso de revisión del contrato colectivo en 2018.
Al ser consultado por si veía espacio para una nueva negociación en Escondida, esta vez por la jornada excepcional, el presidente de BHP Minerals Americas, Daniel Malchuck, respondió que «esas conversaciones están empezando», aunque subrayó que la compañía ha estado focalizada en la puesta en marcha de la mina ubicada en Antofagasta.
El acuerdo de jornada excepcional permitió, en 2013, que los trabajadores tuvieran turnos 7×7 -una semana en la mina, con jornadas de 12 horas, y otra de descanso-, lo que fue incluido en el contrato colectivo.
En esa oportunidad, el acuerdo significó un pago de $6 millones por trabajador. La posición del sindicato es que si bien se prorrogó el contrato colectivo por 18 meses al invocarse el 369, los lineamientos de la Dirección del Trabajo (DT) impiden que las jornadas excepcionales se prolonguen por más de cuatro años sin una renovación expresa por parte de los trabajadores, plazo que se cumpliría en julio.
Respecto al dictamen de la DT que apoyó la tesis del sindicato de que el contrato colectivo extendido culmina en julio de 2018 y la opción de que la empresa recurriera a la justicia, Malchuck sostuvo que «siempre hemos acatado todas las decisiones; no nos preocupa. Lo que queremos es llegar a un acuerdo».