CAP recorta personal en filial Argentina y dobla esfuerzos para rentabilizar Huachipato

Feb 1, 2017

La empresa descartó reiniciar operaciones de línea de producción de planos en Huachipato e implementó plan para revertir pérdidas recurrentes.

(Pulso) Medidas adicionales de reducción de costos ha implementado CAP en dos de sus filiales, Huachipato y Tubos Argentinos. Si bien las razones son diferentes -sobre oferta de acero en el primer caso, y el momento económico interno en el segundo-, las medidas apuntan a lo mismo: mejorar la situación financiera de sus filiales.

En concreto, y según revelan los estados financieros de la empresa, durante diciembre el directorio de Huachipato -filial de CAP Acero- aprobó el plan de negocios para el período 2017-2021 de la empresa, el cual incluye un completo plan para “revertir su situación de capital de trabajo negativo y de pérdidas recurrentes”.

Dentro de las medidas, está descartar el reinicio de operaciones de la línea de laminación de planos en caliente; para ello se procedió al castigo de los activos pertenecientes a esta línea de producción por unos US$32 millones. «La gradual implementación de las medidas de reducción de costos y estrategia de operación permitirá a la filial asegurar la continuidad de sus operaciones rentables en el corto plazo. A través de su Matriz CAP S.A. tiene capacidad de acceder al sistema financiero para financiar sus operaciones, lo que a juicio de la administración determina su capacidad de continuar como empresa en marcha”, señaló.

Por su parte, la filial argentina de CAP, Tubos Argentinos -dedicada al corte de bobinas, el planchado de chapa laminada en frío, caliente y galvanizado, entre otros- tuvo que implementar un duro plan de reducción de costos, lo que incluyó la desvinculación de 17% de la plana.

Tubos Argentinos -que cuenta con dos plantas, una ubicada en la localidad de Talar de Pacheco y otra en Justo Daract- se vio duramente afectada por los cambios económicos llevados adelantes por el gobierno de Mauricio Macri, entre las que se encuentra la eliminación de las restricciones cambiarias, la suspensión de las retenciones a las exportaciones y el ajuste de las tarifas de los servicios públicos.

Todo esto, explican desde CAP, se vio reflejado con una retracción en el mercado en general y en particular el del acero. Por ello, a mediados de año se decidió programar la suspensión temporal y parcial de las actividades de producción de sus plantas: una que se realizó durante la primera semana de junio, otra, durante el mes de julio.

“Esta suspensión tuvo como objetivo principal, además de regularizar los niveles de stock de ambas plantas, reacomodar y acelerar los traslados de las maquinarias a fin de concluir con la obra de ampliación denominada ‘Tubos Grandes’, inversión iniciada en 2015 en la planta ubicada en General Pacheco, lo que posibilitará a la filial a insertarse en nuevos mercados comercializando tubos de mayor diámetro”, indican.

Sin embargo, y dado que la situación económica no repuntó en la segunda mitad del año, la administración debió tomar medidas más duras, y elaborar durante el último trimestre del año, un plan de reducción que costos que incluyó una reestructuración de personal y ejecutivos. “Durante los meses de noviembre y diciembre se desvinculó alrededor del 17% del plantel, además de profundizar en los análisis de gastos y potenciales reducciones tendientes a enfrentar el 2017 con una estructura de gastos fijos más acorde a los niveles de actividad que se vislumbran para el próximo semestre”, indicó.

Lo último
Te recomendamos

REVISTA DIGITAL

Temas relacionados

Suscríbase al Newsletter Minería Chilena