El slogan “Un Mundo de Inspiración” comenzará a sonar en Chile a partir de la llegada de la multinacional de ingeniería y construcción Mota-Engil, que ya abrió su oficina en Santiago, expandiendo así su presencia en Latinoamérica. La compañía de origen portugués ya tiene operaciones en México, Colombia, Brasil y Perú, al igual que en una veintena de países de Europa y África.
Considerada en el ranking de las cien mayores constructoras a nivel mundial (de la publicación Engineering News Record-ENR), Mota-Engil Chile se enfocará en minería, un área que ha desarrollado principalmente en Perú y en países de África como Angola, Mozambique, Zimbabue y Malawi.
La empresa destaca que el incierto escenario de la industria minera no es un obstáculo para los planes de Mota-Engil en el país. Al contrario, es una oportunidad para dar a conocer su propuesta diferenciadora, que pone el énfasis en identificar oportunidades de mejora, incorporar tecnología y métodos de construcción innovadores y con un enfoque en el negocio de los clientes.
Considerando la actual crisis de precios de los commodities, la firma pretende contribuir a rentabilizar proyectos que, en base a la forma tradicional de diseñar, financiar, ejecutar, operar y mantener, se encuentran en una situación de progreso incierto.
“En Mota-Engil buscamos generar soluciones para impactar positivamente las variables que afectan al Capex y al Opex. Creemos que, con un enfoque de ejecución diferente al tradicional, podemos disminuir el costo de un proyecto, en términos generales, hasta un 20%, y a la vez asistir a nuestros clientes en la identificación de oportunidades de financiamiento. Esto puede ser determinante para un proyecto, considerando las actuales condiciones de mercado”, sostiene Mario Baeza, vicepresidente Minería y Energía de Mota-Engil América Latina.
Según cifras de Cochilco, las inversiones detenidas en Minería sobrepasan los US$40.000 millones. En la mediana minería, que es el sector que privilegiará Mota-Engil, se estima que el recorte de la cartera de proyectos llega al 37%.
De acuerdo a Mario Baeza, “con una experiencia de construcción global de 70 años operando en Europa y África, y casi dos décadas en Latinoamérica, podemos contribuir a dar nuevos bríos a la industria nacional, a través de una ejecución orientada a aumentar la productividad en base a nuevas técnicas de construcción, que incluyen Modularización, Preensamblaje, equipos de última generación y la adición de liderazgo técnico especializado a las actividades de construcción; además del desarrollo de ingeniería enfocada en construir”.
A nivel global, durante 2014, Mota-Engil tuvo ventas por 2.368 millones de euros, de los cuales América Latina representa un 23%. El grupo cerró el año con una cartera de pedidos de 4.400 millones de euros, de los cuales las operaciones de Latinoamérica representan un 45%. “En Chile, en un horizonte de 5 años, esperamos llegar a representar un 20% del volumen regional”, proyecta el vicepresidente de Minería y Energía para Latinoamérica.